La cultura digital, la moda, la violencia de género, el fútbol, la inseguridad ciudadana, el cambio climático y más. Todos los temas que nos rodean son materia de estudio antropológico, ese análisis minucioso que busca explicar las causas, riesgos y repercusiones de asuntos complejos.
El del antropólogo es, digamos, un trabajo de hormiga para desmenuzar los problemas sociales y entenderlos en su totalidad. Y, para eso, utiliza la observación —de preferencia a través de la convivencia— como técnica de investigación. Aquí no basta con una encuesta detallada o una larga entrevista: estos profesionales necesitan acercarse a su objeto de estudio de verdad.
“El antropólogo estudia la diversidad y las particularidades de las culturas. Para eso, utiliza herramientas como el análisis en profundidad y la convivencia con diversos grupos, indaga en los modos de pensar, formas de organización, prácticas culturales y sociales”, cuenta Patricia Ames, coordinadora de la especialidad de Antropología de la Pontificia Universidad Católica del Perú.
Si te atreves a explorar este camino, podrás especializarte en educación, religiones, minería, niñez, edad avanzada, el mundo andino o el amazónico, salud, educación, política, las zonas urbanas y hasta en antropología forense o física. Es como si pudieras ponerle cualquier apellido al nombre ‘antropología’, según la especialización que realices. Y ellas no están ajenas a las nuevas tendencias y modas. ¿Resulta extraño? La antropología digital, por ejemplo, busca comprender cómo socializan las personas a través de objetos tecnológicos y definir qué se entiende por ‘social’ en ese ámbito, cómo ingresan los dispositivos en la vida cotidiana y qué impacto tienen.
-Amplio campo de acción-
Francesca Ucelli, antropóloga del Instituto de Estudios Peruanos, se desempeña en el campo de la investigación y ha escrito tres libros. Ella asegura que el terreno de la antropología es muy amplio. Así, los profesionales pueden dedicarse a la investigación, la docencia, trabajar en el sector público —donde una mirada que priorice la diversidad es importante—, dirigir programas de desarrollo en recursos humanos o, incluso, minería, trabajo en comunidades y marketing; pues la metodología de aproximación cualitativa permite conocer al público a fondo.
“El antropólogo tiene una mirada holística, que permite complementar y entender la perspectiva del otro. Y eso lo hace un profesional muy versátil”, dice Ucelli.
Ahora bien, más allá de la especialidad que elijas, la antropología —en términos generales— estudia al ser humano en su totalidad: sus características físicas, biológicas y culturales, sin dejar de lado el entorno social y físico. ¿El objetivo? Comprender el funcionamiento de una comunidad o sus problemas.
En un país multicultural como el nuestro, los antropólogos son muy demandados para descifrar las realidades sociales y los procesos que las afectan. También para ayudar a solucionar conflictos, como los relacionados con la actividad minera.
-Diferencias con la sociología-
No es atípico: muchas veces se suele confundir el trabajo de un antropólogo con el de un sociólogo. Sin embargo, las diferencias son profundas. Mientras la antropología se centra en las personas y en la interacción cara a cara, para generar y analizar datos cualitativos y denoscriptivos; la sociología estudia a la sociedad, y cómo esta se organiza y gestiona sus recursos con datos cuantitativos.
Si decides estudiar Antropología, Patricia Ames explica que, durante tu vida universitaria, realizarás trabajos de campo que abordarán las especialidades mencionadas y otras más. Ahí será muy importante tu observación directa y él contacto con diversos entornos sociales y culturales, que suelen ser distintos de los que frecuentas. Además, leerás trabajos de investigación y escribirás ensayos.
Esta es una carrera de letras —Humanidades, y por esto es esencial tu curiosidad y el interés por la gente. Así, podrás llegar a verdades o conclusiones muy cercanas a la verdad, cuando otros solo tienen suposiciones. ¿Un dato que suele pasar inadvertido? Hoy los antropólogos tienen muchas alternativas de trabajo, y cada vez resulta más evidente que las empresas y organizaciones necesitan conocer mejor a sus públicos objetivos. //
PERFIL DEL ESTUDIANTE
Esta carrera es para ti si:
-Sientes curiosidad por conocer a otras personas, culturas, lugares y costumbres.
-Tienes espíritu de investigación.
-Te gusta leer, viajar e interactuar con la gente.
-Abordas las cosas con sentido crítico y un deseo de conocer la verdad.
DÓNDE ESTUDIAR
-Pontificia Universidad Católica del Perú
-Universidad Nacional Federico Villarreal
-Universidad Nacional Mayor de San Marcos
DÓNDE TRABAJAR
-Sector público. Ministerios y diferentes instituciones del Estado.
-Sector privado. Espacios de innovación, design thinking, marketing, responsabilidad social empresarial y relaciones comunitarias.
-ONG. En promoción del desarrollo.
-Organismos de cooperación internacional. Como los pertenecientes a las Naciones Unidas o de la banca multilateral.
-Ámbito académico. Como docente en universidades.
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