El avance de la variante ómicron es uno de los principales factores detrás del impresionante aumento en el número de nuevos casos de covid-19 registrados en varias partes del mundo.
Pero, ¿qué puede hacer una persona que tiene síntomas de covid, como fiebre, tos, cansancio, pérdida del gusto u olfato, dolor y diarrea, para saber si tiene la enfermedad? ¿Qué exámenes están indicados?
Explicamos a continuación las pruebas más habituales y cuáles son las ventajas y desventajas de cada una de ellas.
Esta prueba se considerada el “estándar de oro” por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En la práctica, esto significa que brinda los resultados más confiables y define si un individuo tiene covid-19 o no.
Realizada con un hisopado nasal y oral, en el que se frota un hisopo de algodón flexible en la punta en la parte posterior de la nariz y la boca para recolectar una muestra del paciente, esta prueba puede detectar la presencia del material genético del coronavirus.
Los laboratorios suelen aconsejar que la muestra se tome entre el tercer y el séptimo día después de la aparición de los síntomas.
Esto se debe a que la RT-PCR detecta el ARN (el material genético del virus), y esa ventana de tiempo es el período de la infección cuando hay mayor actividad viral y es más fácil hallar el causante de covid-19 en el fondo de la garganta.
Sin embargo, en algunos casos, el médico puede indicar que esta prueba se realice el primer o incluso el décimo día de síntomas.
A pesar del alto grado de confiabilidad, esta opción también tiene algunas desventajas: es más cara y el informe con resultados puede tardar más de un día en estar listo.
“Además, la RT-PCR es un método que requiere profesionales altamente capacitados y equipos de alta complejidad, que no están fácilmente disponibles en todos los laboratorios”, afirmó el patólogo Wilson Shcolnik, presidente de la junta directiva de la Asociación Brasileña de Medicina Diagnóstica (Abramed).
Aún en el campo de las pruebas moleculares, algunos laboratorios y farmacias también ofrecen el PCR-Lamp. También investiga la presencia de ARN viral en saliva, pero su resultado no se considera tan preciso como el obtenido en RT-PCR.
“El Lamp puede ser una buena alternativa cuando no se dispone de RT-PCR”, sugirió Shcolnik.
Otra opción, que se ha vuelto más popular recientemente con la epidemia de gripe H3N2, se llama paneles virales.
Estas pruebas son capaces de analizar y diferenciar si la persona está infectada por coronavirus, influenza (que causa gripe) y virus respiratorio sincitial (una de las causas del resfriado), entre otros patógenos.
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También conocida como prueba rápida, las agencias de salud y los expertos consideran este método “menos sensible”.
En otras palabras, esto significa que sus resultados son un poco menos fiables en comparación con la RT-PCR.
La tasa de falsos negativos, cuando la prueba dice que la persona no está infectada con el virus de la covid pero en realidad tiene la enfermedad, es ligeramente más alta en las pruebas de antígenos.
Para aliviar este grado de incertidumbre, muchos sitios e instituciones recomiendan repetir la prueba de antígenos durante varios días consecutivos (a veces durante toda una semana).
Así, es posible garantizar la detección del coronavirus en alguna etapa del proceso infeccioso, si realmente se encuentra en el cuerpo de ese individuo.
Entre sus ventajas, se puede destacar el menor precio y la rapidez del resultado -como ya lo dice el nombre popular de este método, es posible saber si la prueba es positiva o negativa en 15 a 30 minutos.
“Las pruebas de antígenos son capaces de entregar el resultado en un plazo más corto, sin necesidad de centralizar muestras e informes. Pueden ser de gran utilidad en una situación de alta demanda”, señaló la infectóloga Carolina Santos Lázari, del Grupo Fleury, un grupo privado de medicina diagnóstica.
Estas pruebas brindan un apoyo importante para un diagnóstico temprano y rápido, capaz de interrumpir las cadenas de transmisión del virus en la comunidad“, agregó la médica.
Este examen también se realiza con el hisopado nasal y oral, que recoge el material en la parte posterior de la boca y la nariz.
A diferencia de la RT-PCR, que evalúa la presencia de material genético, la prueba de antígeno busca la proteína N en la muestra.
Lázari explicó que la “N” proviene de la nucleocápside, una de las estructuras que componen el coronavirus.
Aquí, nuevamente, hay una ventana ideal para realizar la prueba: para una mayor precisión en el resultado, debe realizarse tres días después del inicio de los síntomas.
“Este tiempo de espera es deseable porque el paciente puede tener una carga viral menor en los primeros días, lo que reduce la sensibilidad de la prueba de antígeno y puede conducir a un resultado falso negativo”, explicó el infectólogo Alberto Chebabo, de Dasa, una red de laboratorios, hospitales y otros servicios de salud privados.
“Es decir: si el individuo se somete a una prueba de antígeno tan pronto como siente los primeros síntomas y el resultado es negativo, esto no excluye totalmente la posibilidad de un diagnóstico posterior de covid”, aclaró el médico, quien también es director del Hospital Universitario Clementino Fraga Filho, de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ).
¿Cuándo realizar estas pruebas?
Básicamente, hay dos situaciones que requieren un examen para diagnosticar o descartar la covid-19.
La primera es cuando una persona tiene uno o más de los síntomas típicos de la enfermedad, que se pueden ver en la siguiente lista:
• Fiebre
• Tos
• Cansancio
• Pérdida del gusto o el olfato
• Dolor de garganta
• Dolor de cabeza
• Dolor en el cuerpo
• Diarrea
• Irritación de la piel o los ojos
La segunda es cuando la persona ha tenido contacto cercano con alguien que sospecha o ha sido diagnosticado con covid.
“Algunos países también tienen políticas para distribuir las pruebas como una forma de detección, con el objetivo de identificar a los pacientes sin síntomas y aislarlos temprano, antes de que sigan transmitiendo el virus”, agregó Chebabo.
Básicamente, hay dos situaciones que requieren un examen para diagnosticar o descartar la covid-19.
La primera es cuando una persona tiene uno o más de los síntomas típicos de la enfermedad, que se pueden ver en la siguiente lista:
• Fiebre
• Tos
• Cansancio
• Pérdida del gusto o el olfato
• Dolor de garganta
• Dolor de cabeza
• Dolor en el cuerpo
• Diarrea
• Irritación de la piel o los ojos
La segunda es cuando la persona ha tenido contacto cercano con alguien que sospecha o ha sido diagnosticado con covid.
“Algunos países también tienen políticas para distribuir las pruebas como una forma de detección, con el objetivo de identificar a los pacientes sin síntomas y aislarlos temprano, antes de que sigan transmitiendo el virus”, agregó Chebabo.
Si tienes los síntomas típicos de covid, lo ideal es permanecer aislado, incluso antes de realizar la prueba, o si no puedes realizar el examen por falta de disponibilidad.
Al evitar el contacto con otras personas, reduces el riesgo de transmitir el virus y crear nuevas cadenas de transmisión entre tus contactos cercanos.
Después del examen, las recomendaciones de qué hacer dependerán mucho del resultado.
Si es negativo (es decir, no tienes covid), es posible reanudar las actividades, siguiendo las precauciones básicas, como usar mascarillas, evitar aglomeraciones y vacunarte (si no has completado el régimen de dos o tres dosis aún).
Pero recuerda que siempre debes sopesar este resultado, especialmente si has tenido una prueba de antígeno, donde el riesgo de un falso negativo es mayor.
Esta precaución debe aumentar si persisten síntomas que sugieren infecciones respiratorias. Además del riesgo de falsos negativos, también existe la probabilidad de que tengas gripe, otra enfermedad que también puede ser muy grave.
En algunos casos, puede ser necesario repetir el examen unos días después, siguiendo el consejo de un profesional de la salud.
Ahora bien, si el resultado es positivo (lo que significa que tienes covid), debes tomar otras medidas que protejan tu propia salud y la de todos los que te rodean.
Además del aislamiento, es importante notificar a los contactos cercanos, monitorear los síntomas, descansar, mejorar la hidratación y acudir a un hospital si las molestias empeoran.