Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Un equipo de investigadores de la Universidad de Basilea (Suiza) ha utilizado un modelo matemático para identificar los genes responsables de dirigir en el cerebro determinados procesos mentales como aprender, recordar u olvidar, según un estudio publicado en al revista PNAS.
La memoria es básicamente una función cerebral, un fenómeno de la mente que permite al organismo codificar, almacenar y recuperar información. Surge como resultado de complejas conexiones sinápticas repetitivas entre las neuronas. Sin embargo, lo complejo de este proceso es que los recuerdos están en más de una parte del cerebro.
En el caso de la memoria a corto plazo, la corteza prefrontal es responsable de esta. En cambio, para la memoria a largo plazo el hipocampo es la zona destacada. La memoria semántica, o la de significados, se queda en nuestro lóbulo temporal.
En la investigación se analizaron cómo se producen aquellos mecanismos cerebrales que no pueden observarse directamente, como la capacidad para aprender otro idioma, resolver problemas o recordar hechos pasados.
Para garantizar un rendimiento óptimo del cerebro, en todos ellos es necesario que trabajen de forma conjunta varios procesos cognitivos. Pero hasta ahora no se sabía si todos estos procesos de la memoria eran controlados por un mismo grupo de genes o había diferentes mecanismos moleculares implicados, en parte por la imposibilidad de cuantificarlos, lo que hacía que permanecieran inaccesibles para la ciencia.
Sin embargo, el matemático Gediminas Luksys y su equipo han sido capaces de describir por primera vez con éxito diferentes procesos de la memoria humana, para lo que utilizaron datos de más de 1.700 adultos. Gracias a un modelo informático, fueron capaces de medir los procesos y llevar a cabo análisis genéticos distintos de cada uno, lo que permitió observar que se basan en diferentes conjuntos de genes.
Los resultados muestran que hay diferentes perfiles genéticos que subyacen a cada actividad cerebral. Por ejemplo, han visto la asociación entre un conjunto de proteínas transportadoras y el proceso de aprendizaje, o entre un conjunto de células con la memorización de datos.
Los autores creen que estos hallazgos contribuirán a una mejor comprensión de los complejos procesos de la memoria humana y podrían conducir al desarrollo de futuros tratamientos para varios trastornos mentales.
Fuente. Unocero.com