Nueva York (Reuters). La cumbre de Naciones Unidas sobre el cambio climático, iniciada el día martes, acordó ampliar el uso de energías renovables y recaudar miles de millones de dólares en asistencia a países en desarrollo. Con estas medidas se busca incrementar las posibilidades de un acuerdo a gran escala para desacelerar el calentamiento global.
La cumbre es presidida por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y establece objetivos para detener la pérdida de bosques tropicales para 2030, mejorar la producción alimenticia y elevar en un 30% de las ventas de vehículos eléctricos nuevos para el 2030.
Las iniciativas no vinculantes fueron fijadas el martes por varias coaliciones de gobiernos, compañías multinacionales, ciudades, grupos financieros, inversores, organizaciones ecologistas y otros grupos.
Los objetivos pretenden ayudar a preparar una cumbre de 200 naciones en París a fines de 2015, para concluir un acuerdo que ayude a frenar las emisiones de gases de efecto invernadero. Hasta ahora el trabajo ha sido lento, ya que muchos países están más centrados en mejorar su crecimiento económico y crear empleos.
INVERSIÓN PARA UN MEJOR FUTURO
Los gobiernos y los inversores dijeron que recaudarían más de 200 mil millones de dólares en financiación para el clima para finales de 2015, incluidos 30 mil millones en bonos verdes de bancos comerciales y 100 mil millones de un grupo de bancos de desarrollo.
“Esto servirá como un catalizador para finalizar un acuerdo universal y significativo en París sobre cambio climático en el 2015”, dijo Ban acerca del dinero.
Naciones Unidas dijo en un comunicado que los compromisos de apoyo financiero darían un “impulso significativo” a la promesa de las naciones ricas, en el 2009, de recaudar para el 2020 cien mil millones de dólares que ayudarán a los países pobres a cambiar a energías renovables y adaptarse a las olas de calor, sequías y el aumento del nivel del mar.
TODOS UNIDOS
Por otro lado, una alianza de unos 30 países, incluido Estados Unidos y una coalición de compañías multinacionales, fijaron el objetivo de reducir a la mitad las pérdidas de bosques para 2020 y de detener la pérdida para 2030.
Si fuera totalmente implementado, esto evitaría entre 4.500 millones y 8.800 millones de toneladas de emisiones de dióxido de carbono al año, equivalente a las emisiones de los 1 mil millones de coches del mundo.
La quema de bosques, desde la Amazonía hasta el Congo, supone hasta una quinta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por los humanos. Empresas como Walmart, Unilever, Wilmar International, General Mills, Asia Pulp & Paper y Nestlé, además de organizaciones no gubernamentales y grupos de pueblos indígenas, han firmado el plan.
La declaración está respaldada por más de 1 mil millones de dólares de países como Gran Bretaña, Alemania y Noruega, el último dijo que aportaría hasta 300 millones de dólares a Perú y 150 millones de dólares a Liberia.
“Las acciones aprobadas hoy reducirán la pobreza, incrementarán la seguridad alimentaria, mejorarán la aplicación de la ley, asegurarán los derechos de los pueblos indígenas y beneficiarán a las comunidades de todo el mundo”, dijo Ban.