Facebook, Google y otros gigantes tecnológicos a menudo cuentan con programas especiales para reclutar talento joven, especialmente estudiantes. Este recurso resulta imposible para starups dejándolas muchas veces sin oportunidad de poder desarrollarse. Es por eso que nació SharpesMinds, informa el sitio “TechCrunch”.
Las grandes empresas pueden ofrecer compensaciones más grandes, pero las starups son también grandes oportunidades de desarrollo. Y es a explotar esas oportunidades a la que apunta la herramienta destinada a encontrar estudiantes que ayuden a estas empresas antes de ser tentados por Facebook o Google.
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El producto es obra de Edouard Harris y Jeremie Harris. Su objetivo es crear un nuevo tipo de servicio impulsado por aprendizaje automático que identifique el talento para el desarrollo de tecnología en jóvenes, ponerlos a prueba y luego dirigirlo hasta un posible empleador.
“En nuestro caso, todo se redujo al hecho de que comenzamos como estudiantes de posgrados, vimos a la flor y nata de los estudiantes de posgrado recogidos por Google o Facebook”, dijo Jeremie Harris.
“Los recibían incluso antes de graduarse de un programa de posgrado o pregrado. Fue una gran lucha [para las starups] porque todas las mejores personas fueron cazadas furtivamente temprano. Grandes empresas que tienen operaciones gigantes de reclutamiento en campus. Si eres una starup, ni siquiera tienes una oportunidad para estas personas. Ni siquiera existen en tu radar. Lo que pensamos fue, ¿por qué no tomamos lo que están haciendo por sí mismos, lo convertimos en un servicio y exponemos ese servicio a nuevas starups y compañías?”.
El proceso suele ser así: una starup publica ofertas de trabajo y los requisitos que debe de cumplir el interesado en el puesto. Luego, los estudiantes postulan a través de SharpesMinds. Luego de un primer filtro para hallar a los calificados para la labor se hace un seguimiento del estudiante, son entrevistados, evaluados y puestos a prueba con un problema naciente en la empresa para que la misma decida su contratación.
Si el proceso es exitoso, la starup contará con un talento temprano en sus filas que ya conoce su método y rigurosidad de trabajo. Todos ganan, la empresa a encontrar un colaborador y el estudiante que de no ser contratado al menos habrá realizado pruebas en el mercado laboral y optar por trabajar en una starup o preferir apuntar a empresas como Facebook o Google.