Hace algunos días Google volvió a agitar las aguas de la privacidad al anunciar una nueva integración entre Gmail y su red social Google+.
En pocas palabras, el buscador permitirá que cualquier usuario de Google+ pueda enviarte un mensaje directamente a tu correo electrónico, incluso si no conoce tu dirección electrónica o es uno de tus contactos.
La reacción al anuncio ha sido de rechazo, a juzgar por tuits y mensajes en redes sociales. La conmoción se explica sencillamente: la gente aún ve su correo electrónico como un espacio privado en el que se tiene control absoluto.
Google quiere desafiar ese concepto a través de una sutil integración. Pero ¿cómo funciona?
En forma automática y predeterminada Gmail permitirá que cualquier usuario de G+ te envíe un mensaje, siempre y cuando los dos (emisor y receptor) tengan una cuenta en Gmail y en Google+. El mensaje de tu nuevo amigo llegará a la pestaña llamada “Social” en Gmail y no a tu Bandeja de Entrada.
La clave aquí es la palabra “predeterminada”. A menos que activamente el usuario diga “no quiero”, el correo permitirá las comunicaciones de terceros.
Para evitarlo lo único que hay que hacer es ir a Configuración dentro de Gmail, encontrar la sección titulada “¿Quién puede enviarte un correo electrónico a través de tu perfil de Google+?” y cambiar “Cualquier usuario de Google+” por “Círculos ampliados” (los seguidores de las personas a quienes sigues), “Círculos” (las personas a quienes sigues) o “Nadie”.
Como verán el gran criticismo hacia el gigante de internet es que permita que cualquiera te envíe un mensaje, a menos que tú digas que no, y no al revés. Más fácil, dicen, hubiera sido que uno pudiera elegir libremente si quiere o no recibir esos mensajes.
Por si eso fuera poco, tras la primera ola de polémica llegó una segunda. Resulta que Google está diferenciando a sus usuarios entre cuentas con miles de seguidores y aquellos sin tanta popularidad.
Para los primeros el buscador ha desactivado la opción de la controversia para evitar inundarlos con mensajes (celebridades las estoy mirando a ustedes), a menos que activamente acepten la comunicación de terceros en su configuración. El resto de los mortales tendrá que aceptar los mensajes a menos que activamente apague la opción.
La pregunta obvia es ¿qué hay detrás de esta nueva integración? Dos razones vienen a la cabeza cuando uno trata de razonar cuáles son las motivaciones del buscador.
La primera y más obvia es el expandir las conexiones sociales dentro de Google+. Asume que al permitir a terceros contactarse, ambos pueden ponerse en sus respectivos círculos y crecer así su red.
La segunda razón parece ser más profunda y estratégica. El correo electrónico está entrando en una fase de declive, gracias al uso de redes sociales y apps como Whatsapp como herramientas de comunicación. El buscador esperaría contrarrestar el menor uso de Gmail con un mayor uso de Google+.
Ciertamente no es la primera red social que intenta abrirle la puerta trasera a extraños. Facebook permite que terceros te envíen mensajes que se almacenan en la casilla “Otros” que nadie ve, a menos que paguen para que lleguen a tu página de mensajes.
Twitter también ha experimentado con una propuesta similar. En su caso se trata de que los usuarios decidan si quieren recibir Mensajes Directos de gente a la que no siguen.
Ninguno de ellos, claro, tiene el poder de Google de lograr combinar una red social con correo electrónico. Y eso es lo que preocupa a más de uno.