Lilly Allen no imaginó que una broma aparentemente inofensiva terminaría convirtiéndose en una investigación policial en Australia. Y es que a su paso por dicho país, la cantante inglesa se tomó una fotografía que, pese a no tener malas intenciones detrás, no le ha agradado a las autoridades.
Según explicó el portal “Mashable”, Allen fue escoltada por la Policía Federal Australiana a su salida del aeropuerto Gold Coast. El buen ánimo de los guardias y de la intérprete de “Alfie” fue tal, que esta se animó a pedirle a uno de ellos que simule un arresto para una fotografía que compartió en su Instagram.
La imagen no duró mucho en la red, pues la policía de dicho país decidió abrir una investigación sobre la imagen y el oficial que participó en ella, quebrando el protocolo correspondiente.
“Los miembros de la Policía Federal Australiana están sometidos a ciertos reglamentos”, se informó en un comunicado de la unidad citado por la prensa local.