París (EFE)
El actor francés Gérard Depardieu, célebre por una prolífica carrera cinematográfica salpicada de excesos, aseguró en una entrevista publicada hoy que bebe cuando se aburre y que puede llegar a consumir hasta 14 botellas de alcohol en un día.“Empiezo en casa, con champán o vino tinto antes de las 10.00. Después más champán, luego pastis (anís francés), quizá media botella. Después la comida, acompañada de dos botellas de vino. Por la tarde, champán, cerveza y otra vez pastis hacia las 17.00 para terminar la botella. Más tarde, vodka y/o whisky”, comenta el actor en una entrevista que publica la revista “So Film”.El exiliado fiscal más famoso de Francia, protagonista en el pasado de sonadas escenas ebrio en aeropuertos o accidentes de tráfico con más alcohol en sangre que el permitido para circular, reconoce que una vez que empieza a beber, no puede moderarse.“Cuando me aburro, bebo” dice el actor, que asegura que nunca termina “completamente borracho, solo un poco achispado” y que tiene un remedio propio para no terminar ebrio: “todo lo que necesitas es una siesta de diez minutos y ya está, un poco de vino rosado y te sientes como una rosa”.“Si comienzo a beber, no bebo como una persona normal. Puedo tomarme 12, 13, 14 botellas por día”, asegura Depardieu, al que se ha visto en la gran pantalla como Obélix el galo, Cyrano de Bergerac o Dominique Strauss-Kahn.El actor, de 65 años, asume que sus excesos entrañan un riesgo para la salud y revela que se ha sometido a una operación para colocarse un “bypass” por culpa del colesterol “y otras cosas”.“Debo ser prudente. De todas formas, no voy a morirme ahora mismo. Aún tengo energía”, presume el actor y propietario de varias bodegas y restaurantes, que el pasado julio anunció su intención de producir “vodka biológico” a partir de “agua de manantiales de las montañas y productos respetuosos con el medio ambiente”.