(Nueva York, EFE)
Tal y como ella misma deseaba, el funeral de Joan Rivers se convirtió hoy en todo un desfile de estrellas, que se reunieron en el Upper East Side de Nueva York para dar su último adiós a la popular actriz, humorista y presentadora.
Actrices como Whoopi Goldberg y Sarah Jessica Parker, personalidades del mundo de la comunicación como Howard Stern y Geraldo Rivera y poderosos empresarios como Donald Trump fueron solo algunos de los famosos que acudieron a la cita.
También estuvieron presentes en el templo judío Emanu-el muchos compañeros de Rivers en el canal E!, donde presentaba el programa “Fashion Police”, entre ellas Kelly Osbourne, hija de Ozzi Osbourne.
Rivers fue despedida con un servicio privado, en el que Stern pronunció un emocionante discurso sobre su “mejor amiga” y en el que también intervino la actriz Audra McDonald, según recoge la revista “People” en su edición digital.
UN ADIÓS GLAMOROSOMelissa Rivers, la única hija de Joan, agradeció a los presentes su apoyo y leyó una carta que había escrito a su madre cuando aún vivía.
Como cierre, Hugh Jackman cantó el tema de Peter Allen “Quiet Please, There's a Lady on Stage” y una banda de gaiteros interpretó el clásico “New York, New York”.
El funeral, por todo lo alto, cumplió así uno de los deseos de Rivers, que en un libro publicado en 2012 había bromeado sobre su voluntad de tener una despedida propia de Hollywood y sus alfombras rojas.
La popular presentadora falleció el jueves, 4 de septiembre, a los 81 años en un hospital de Nueva York, al que había ingresado debido a problemas respiratorios durante una pequeña intervención médica en la garganta el 28 de agosto.
Las autoridades están aún investigando las causas de la muerte, mientras que las pruebas llevadas a cabo hasta ahora por los forenses no han podido aclarar el fallecimiento.