Este fin de semana se emitió el capítulo 19 de “Dragon Ball Super”. Bajo el título “¡Vuelve la desesperación! ¡El malvado emperador Freezer es resucitado!”, este episodio nos presentó una variante muy importante en la historia.
El capítulo inicia con Freezer siendo torturado a punta de ternura en el “infierno” al que ha sido enviado tras enfrentarse con los “Guerreros Z” en “Dragon Ball Z”. Mientras tanto, los secuaces de Freezer planean cómo resucitar a su antiguo emperador y, para ello, se pondrán saldrán a buscar las Esferas del Dragón en la Tierra.
En otra escena, Gokú y Vegeta continúan siendo entrenados por Wiss. El entrenador sigue siendo más veloz y más fuerte que sus discípulos y les indica cuáles son sus errores y cómo pueden superarlos, pero sin antes dejar su “autógrafo” en el traje de ambos saiyajines.
En la Tierra, Pilaf y su pandilla continúan con la búsqueda de las Esferas del Dragon, pero son interrumpidos por Tagoma y Sorbet – sirvientes de Freezer – quienes exigen la entrega de las preciadas esferas.
Pilaf junta las esferas e invocan a Sheng Long, Sorbet pide que Freezer sea resucitado – aunque sea en pedazos – y los dos sirvientes de Pilaf piden un millón de zenis (unidad monetaria en el universo de Dragon Ball) y el mejor helado del mundo.