Las calles del barrio de Atahualpa, ubicado en la cuadra 8 de Miró Quesada del Callao, han servido de escenario para las grabaciones de “Sicarios, la serie”, producción para Netflix que se viene gestando en nuestro país.
Álex Prado, director de la ficción peruana comentó que “Sicarios, la serie” es un proyecto independiente privado que será emitido por Netflix. Tendrá quince capítulos y estará protagonizada por 45 actores entre figuras conocidas y nuevos valores.
“Hemos hecho cinco cásting para elegir a los actores que, en su mayoría, son peruanos e influencer. También hay un brasileño, una argentina y venezolanos. Y a medida que avancen las grabaciones incluiremos extras, y esperamos contar con un importante actor internacional”, señala Álex a El Comercio.
Explica que la historia que se contará en “Sicarios, la serie” está inspirada en hechos reales en torno a acontecimientos violentos y de corrupción ocurridos en nuestro país.
“La serie es una ficción, pero tiene un 30 por ciento de realidad peruana sobre temas de corrupción, violencia, muertes; pero también cosas de emprendimiento. Se mostrará el lujo, las drogas, las chicas lindas, la adrenalina. Tiene un mensaje que busca concientizar a las personas”, detalla el realizador.
Esta semana se iniciaron en el Callao las primeras grabaciones de la promoción de la serie. Las Caras de Atahualpa, emblemático lugar chalaco en cuyas paredes están plasmadas imágenes de reconocidas figuras de la música y el fútbol nacional e internacional sirvió de escenario para la grabación de algunas escenas.
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“Hemos grabado en el Callao, pero también tenemos imágenes que se han grabado en Canadá. Es un proyecto ambicioso. Más adelante grabaremos en otros distritos peligros de Lima y en una lujosa ubicada en una zona estratégica”, precisa Prado.
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Explica, además, que una vez concluidas las grabaciones de los 15 capítulos de la serie, el resultado final será enviado a Netflix para que este verifique si el producto cumple con las condiciones dispuestas por el servicio de entretenimiento por Internet.
“Si nos piden hacer algunos cambios a la serie, tendremos que acatar, pues ellos tienen condiciones”, detalla tras destacar que la inversión económica que involucra hacer una serie para Netflix es fuerte.
“Toda la inversión es privada, Netflix no financia la producción, no es su política. Si la serie funciona y nos piden hacer una segunda entrega, probablemente las cosas sean diferentes”, finaliza.