La muñeca poseída del filme “Annabelle” está en camino a convertirse en todo un ícono del terror. Este hecho fue aprovechado por el animador brasileño Silvio Santos para jugar una broma pesada a un grupo de trabajadores.
La cruel broma se hizo más realista por el lugar donde ocurrió: una mansión construida a inicios del siglo XX llamada la residencia del coronel Joaquim Franco de Mello ubicada en Sao Paulo, Brasil.
Esta no es la primera vez que Santos se aprovecha de la popularidad de un personaje de las películas de terror para asustar a las personas. A fines del 2013 hizo una broma similar utilizando a una persona disfrazada de Chucky y en noviembre del 2012 casi causó un infarto a varios por poner a una niña 'fantasma' en un ascensor.
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