César Nakazaki, abogado del sentenciado ex presidente Alberto Fujimori, anunció que planteará al Poder Judicial la posibilidad de que su cliente no sea procesado en el juicio por el caso de la prensa chicha debido a su actual estado de salud.

La Cuarta Sala Penal Liquidadora que conducirá el proceso aún no ha fijado la fecha del inicio de este juicio en el que Fujimori está acusado del delito de peculado por haber comprado la línea editorial de los diarios chicha para su reelección.

Nakazaki refirió a El Comercio que planteará al tribunal que el estado salud de Fujimori no le permite estar en capacidad de enfrentar un juicio.

El letrado agregó que someter a un proceso penal a su patrocinado “implicaría agravar su salud”.

Además, argumentó que la ley indica que una persona va a juicio solo si está en capacidad procesal y uno de los requisitos es estar sano. “Los médicos han señalado que Fujimori no está en condiciones de enfrentar un nuevo juicio”, subrayó.

El abogado agregó que solo aguarda por los resultados del examen médico que se realizará al ex presidente el próximo miércoles para presentarlos junto a su
petición.

Esta evaluación incluiría una junta médica de psiquiatras debido a que el tratamiento para la depresión no estaría dando resultados.

Nakazaki señaló que, pese a las limitaciones de salud de Fujimori, vienen trabajando estrechamente con él en la preparación de la defensa del nuevo proceso que fue autorizado por la justicia chilena con la ampliación de la extradición.

También reveló que tiene previsto formular otro acto de defensa antes de que comience el juicio, pero evitó dar detalles al respecto.

En cuanto al pedido de arresto domiciliario hecho por el nuevo abogado de Fujimori, William Castillo Dávila, Nakazaki sostuvo: “No tengo nada que comentar sobre sus planteamientos”. Precisó que Castillo solo se ocupará de esa propuesta y de evaluar los casos judiciales ya concluidos.

CASO PRENSA CHICHA Según la procuraduría anticorrupción, Fujimori habría desviado S/.122 millones de las FF.AA. para pagar a la prensa chicha y asegurar así su segunda reelección.
 Se pagó a los diarios chicha para enlodar a los opositores del gobierno de Fujimori.