Francisco Lombardi dirigió a Aristóteles Picho en galardonadas películas como La ciudad y los perros (1985) y La boca del lobo (1988). Tuvo una relación cercana y bastante fraternal con el destacado actor, que esta mañana murió víctima de un paro cardíaco.
En diálogo con El Comercio, Lombardi recordó algunos momentos y situaciones que lo relacionaron laboralmente con Picho.
Aristóteles consiguió su papel en La ciudad y los perros porque hicimos un cásting abierto, con gente de todos lados, jóvenes de los talleres. Él era estudiante de teatro, era un actor que tenía un carácter fuerte, incluso una de sus debilidades era su marcado temperamento, precisó el cineasta.
Asimismo, destacó el talento artístico del recordado actor, cuyos restos serán velados esta tarde en el auditorio Los Incas del Museo de la Nación, en San Borja. Era un actor completo, te podía hacer comedia, drama, tenía método. Se reía mucho interpretando a ‘El Sinchi’. Lo disfrutó. Tenía formación teórica, te soportaba bastante, te proponía cosas, dijo.