Ocurrió en el colegio Dora Mayer. (Foto: Captura/Domingo al Día)
Ocurrió en el colegio Dora Mayer. (Foto: Captura/Domingo al Día)
Redacción EC

Killa Miranda, titular de la Dirección Regional de Educación de Lima Metropolitana (DRELM), precisó que la expulsión o separación definitiva de un alumno con conducta inapropiada no es una solución al problema porque no permite a los estudiantes reflexionar sobre su comportamiento y tomar acciones concretas para reparar el daño.

“El artículo 17 de la Ley N° 27337, que promueve la convivencia sin violencia en las instituciones educativas, prohíbe que las medidas correctivas constituyan actos de violencia, trato cruel, inhumano o degradante, incluidos los castigos físicos y humillantes”, dijo Miranda.



La titular del DRELM se refirió al caso de una profesora que sufrió maltratos por parte de varios alumnos del colegio Dora Mayer, ubicado en el .

La funcionaria dijo que las medidas correctivas deben ser reparadoras y efectivas, respetuosas de la integridad física, psíquica y moral de los estudiantes y de los derechos de los niños y adolescentes.

Entre las estrategias que pueden aplicarse en estos casos, mencionó la restauración, los programas de habilidades sociales, la supervisión y el involucramiento familiar y la consejería.

Miranda explicó que la restauración permite que el estudiante restituya el daño causado mediante una acción directa sobre el problema o alguna actividad que mejore el clima de la escuela.

Por otra parte, indicó que para prevenir este tipo de incidentes, se debe impulsar la identificación e intervención temprana para detectar a los estudiantes con problemas de comportamiento y planificar intervenciones adecuadas.

Contenido sugerido

Contenido GEC