Siempre hay un modo de tener una casa limpia y a prueba de mascotas con la eliminación de los rastros de pelos o las manchas de suciedad.
Nuestros perros y gatos suelen ensuciar el ambiente también con mal olor; por ello, si conoces dónde acostumbran a echarse tus mascotas o si están habituadas a subir al sofá, coloca una toalla o alguna tela de preferencia plastificada para proteger su superficie; luego, sacúdela fuera de la casa. Es importante también contar con rollos para pelusas, que permiten que los pelos se peguen a su superficie, con lo cual puedes retirarlos de la ropa o de los muebles.
Adiós manchasSi cuentas con una alfombra, se recomienda que nunca dejes una mancha sin atender de inmediato. Lo primero que debes hacer es secarla con papel toalla y humedecer con un trapo blanco la parte afectada, para volverla a secar y así retirar poco a poco las orina de tus mascotas. Finalmente, debes aplicarle un champú para alfombras con el fin de limpiar la zona afectada. En cuanto al piso, es recomendable que al terminar de asear con el detergente y una vez que esté seco, se trapee nuevamente con una solución de bicarbonato de sodio, ya que ello ayudará a desodorizar la superficie.
Se aconseja pasar la aspiradora una o dos veces a la semana para eliminar las pelusas del piso, de las alfombras y de los muebles. Si tu casa tiene piso de parqué o madera, un trapo húmedo te ayudará a atrapar los pelos de tus mascotas. En este tipo de piso, una mancha de orina se limpia con 1/8 de bencina diluida en un litro de agua. Es ideal elegir muebles de un material que ayude a que los pelos puedan ser eliminados con facilidad; el cuero sintético y la microfibra son una buena opción.
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