Sin duda, la pasión de los mundiales está presente en todas las copas del mundo y ni siquiera la Antártida con su gélido frío puede escapar de la fiebre de Brasil 2014.
Aunque suene poco creíble, quince soldados brasileños que radican en el continente de hielo disfrutaron el reñido encuentro entre su selección y los croatas desde la Estación de Investigación Comandante Ferraz, a menos 10 grados bajo cero.
“Hay un montón de inestabilidad debido a la interferencia solar, que es común en esta época del año y hace caer la comunicación“, manifestó el comandante Carlos Frederico Muthz, jefe de la mencionada estación, donde se vive con intensidad la Copa del Mundo.
Cabe señalar que los soldados pueden ver los partidos gracias a una conexión por internet y no dudaron en usar banderolas e instrumentos musicales para apoyar desde muy lejos al 'Scratch'.
Definitivamente, el plantel del DT Felipe Scolari, que venció con dificultades y una polémica a los croatas, necesitará de la buenas vibras de sus valientes compatriotas de la Antártida para adueñarse del trofeo FIFA.