El superclásico entre Boca Juniors y River Plate, por la vuelta de semifinales de la Copa Libertadores, empezó 15 minutos después de lo programado (7:30 p.m. / hora peruana), debido a la gran cantidad de papel picado que había sobre el campo de La Bombonera.
Miles de hinchas de Boca Juniors lanzaron los papeles desde la tribuna, algo que obligó al árbitro a evitar que se inicie el encuentro en esas condiciones. Tuvo que ingresar personal de mantenimiento del recinto para ayudar a resolver el problema.
Boca Juniors recibe a River Plate en busca de una remontada épica, tras la derrota que sufrió en la ida (2-0), ante un equipo que 'asusta' a sus rivales por su poderío ofensivo.
“Es el partido más importante de mi vida. Más allá de que me ha tocado salir campeón de copas internacionales, por la significación, por la trascendencia y por lo que representa este partido, por el rival y lo que significa, este es el más importante de mi vida”, dijo en la antesala el técnico del Boca, Gustavo Alfaro.
En River Plate, en cambio, las cosas estaban más claras. Fue tan así que el entrenador Marcelo Gallardo mandó a la cancha a los mismos jugadores que empezaron la contienda en el Monumental.