Pekín/China (EFE). El Superclásico de las Américas, jugado por primera vez en Asia, se saldó este sábado en el Estadio Olímpico de Pekín con una victoria de la selección brasileña ante Argentina, que, pese a que tuvo más el balón y gozó de más ocasiones de gol, falló en defensa y no supo parar la letal contra de la 'canarinha'.
El partido comenzó con un buen susto para Brasil, ya que tras el saque inicial un pase largo a Agüero casi acaba en gol, sólo evitado por la falta de acierto final del delantero.
A ello siguieron varios minutos de control albiceleste, como había vaticinado en la víspera el seleccionador argentino, Gerardo 'Tata' Martino. Brasil dejo la posesión a Argentina y de ello se aprovecharon Messi y Di María para crear peligro ante la portería rival.
Brasil continuó ausente, por lo que Argentina se fue acercando cada vez más a la puerta contraria, hasta el punto de que el árbitro chino Fan Qi no pitó un posible penal contra Agüero, y pocos minutos después el delantero del Manchester City falló otra clarísima ocasión tras una buena combinación de Messi y Zabaleta.
Ante al asedio, Brasil, que pese al fiasco del Mundial sigue teniendo galones, fue apoderándose del balón cuando el encuentro rozaba la media hora y, casi sin ruido, logró el primer gol del Superclásico con un remate de Diego Tardelli, una de las más recientes incorporaciones al equipo de Dunga.
Tardelli (llamado así por la admiración de su padre al internacional italiano campeón del mundo en España 82) se aprovechó de un garrafal error de la zaga argentina. Macherano y Fernández no se entendieron y dejaron que el delantero del Atletico Mineiro marcara sin apenas oposición.
Rozando el descanso, llegó una de las jugadas que marcó el partido, cuando el colegiado pitó un penal favorable a Argentina por mano de Danilo. Messi, estrella y capitán del equipo, falló la pena máxima, ya que su disparo, a la izquierda pero poco escorado, fue fácilmente atajado por Jefferson.
La segunda parte comenzó igual de animada, con más posesión para Argentina pero mayor peligro de Brasil, que con las cabalgadas de Neymar y algún intento de Óscar pudo volver a perforar la meta de Romero.
Sin embargo, fue Tardelli otra vez, ya convertido en inesperado héroe del Superclásico, el encargado de sentenciar el duelo, tras un saque de esquina de David Luiz, con un potente disparo contra el que Romero nada pudo hacer.