Iker Casillas apenas pudo jugar 14 minutos como titular. Cuatro minutos antes, a los 10’ de la primera etapa del encuentro contra el Galatasaray por la Champions League, una jugada sin mayor trascendencia obligó al guardameta español a saltar para coger un balón. En ese momento, Sergio Ramos saltó también y lo golpeó con el codo a la altura de las costillas. Una jugada inofensiva cobró entonces mucha importancia.
Así, Diego López, portero titular del equipo merengue en la Liga BBVA, tuvo que ocupar la meta. A su salida, Casillas le entregó la cinta de capitán a Pepe, y fue este quien se la dio a López. La imagen de consuelo de Pepe a Iker, que acompaña esta nota, resume bastante bien el sentir del arquero español.
Hace unos días, Carlo Ancelotti, director técnico del Real Madrid, dijo que Iker sería el portero en la Champions, lo cual causó polémica, ya que nunca antes dos arqueros habían alternado de esa forma en el equipo.