Una verdadera tragedia ocurrió la noche de este sábado en Indonesia. Un total de 127 personas como mínimo fallecieron en el Kanjuruhan Stadium, luego de que fanáticos enardecidos se metieron al campo y la Policía respondió con gases lacrimógenos, lo que provocó una estampida, señalaron las autoridades locales.
“En el incidente, 127 personas murieron, incluidos dos policías. 34 personas murieron dentro del estadio y el resto en el hospital”, indicó el domingo en un comunicado el jefe policial de la provincia de Java Oriental, Nico Afinta.
Seguidores del Arema FC invadieron la cancha del estadio Karnjurhan en la ciudad oriental de Malang luego de que su equipo perdió 3-2 ante el Persebaya Surabaya, la primera derrota ante su archirrival en más de dos décadas.
La policía intentó persuadir a los fanáticos de regresar a las gradas y dispararon gas lacrimógeno después de que dos policías murieron. Muchas de las víctimas murieron pisoteadas.
Afinta señaló que los fanáticos “en un punto se dirigieron a la salida. Se hizo un congestionamiento y en el proceso de acumulación quedaron sin aire”.
El gobierno indonesio se disculpó por el incidente y prometió investigar las circunstancias de la estampida.
“Lamentamos este incidente (...) Es un incidente lamentable que ‘lesiona’ a nuestro fútbol en momentos que los hinchas pueden ir al estadio a ver los partidos de fútbol”, declaró el ministro indonesio de Deporte y Juventud, Zainudin Amali, a la red Kompas.
“Evaluamos rigurosamente la organización del partido y la presencia de aficionados. ¿Volveremos a prohibir la presencia de afición en los partidos? Eso es lo que discutiremos”, agregó.
Con información de AFP.