Casi dos meses después de que una jueza ordenara su detención y sin ponerse a derecho, el ex presidente de Alianza Lima, Guillermo Alarcón, dijo hoy en una entrevista que no ha cometido delito alguno.
“Hubo errores, no delitos”, afirmó el ex presidente aliancista en Radio Programas, refiriéndose a su gestión en el club victoriano. Aseguró que la jueza que ordenó su captura y la de otros ex directivos aliancistas lo hizo vulnerando sus derechos constitucionales.
Quien fuera un resistido dirigente aseguró que la situación ha afectado su salud -“he tenido 15 infartos y vivo con un resucitador al lado. No sé cómo estoy vivo”- y afirmó que Susaba Cuba, la administradora de la institución blanquiazul, “está destrozando el club” y “ha venido dilapidando” su patrimonio porque “perdió sponsors como Hyundai y un terreno al sur de Lima que eran para las divisiones menores. Además ha cobrado al club 2 millones de soles de sueldo”.
Precisó que nunca se presentó a las citaciones “por mi estado de salud. Presenté certificados médicos”. Insistió en culpar a la juez Villavicencio de un extraño poder por una ligazón con el juez César San Martín.
Pocho se mostró como una víctima que sufre una persecución porque ahora la Sunat lo hace responsable de los 20 millones que debe Alianza Lima y “esa es una deuda que el club generó desde el 2001”.
Tampoco aceptó haber robado el dinero de la venta de jugadores como Jefferson Farfán o Reimond Manco. “Eso es algo que nunca pudieron demostrar. No se dejen engañar”. Y dijo que sí entregó la contabilidad del club blanquiazul a Susana Cuba. “Tengo las resoluciones de la Policía y la Fiscalía para demostrarlo”.
Radio Programas informó que la entrevista fue hecha desde la casa del ex dirigente. El mencionado logró un hábeas corpus en Ucayali a través del juez Luis Palomino Morales.