Este 8 de marzo se celebraron 70 años del nacimiento de Teófilo Cubillas, para muchos el más grande referente del fútbol peruano. Aquella historia comenzó en el norte de Lima, con un chico que, como otros tantos, estaba enamorado del fútbol.
Nacido en una de las haciendas de Puente Piedra, Cubillas pasó gran parte de su niñez y adolescencia junto a una pelota. Guillermo La Rosa, quien posteriormente fue su compañero, creció en el mismo barrio y tuvo la oportunidad de ver al primer 'Nene', el muchachito que jugaba en Huracán Boys de ese distrito.
“Él jugaba divirtiéndose. Era un chico sencillo, humilde como todos los del barrio”, contó La Rosa en comunicación con El Comercio. Aunque la férrea disciplina familiar hizo que Cubillas siempre considerara el fútbol como una afición, el entorno del futuro crack fue decisivo en su desarrollo. “Siempre había el apoyo moral, el apoyo que lo podía motivar para seguir creciendo como persona y como futbolista”, explica La Rosa sobre aquellos años en Puente Piedra.
- Afición y descubrimiento -Según admitió el mismo ‘Nene’, llegaba a jugar hasta tres partidos al día cuando era pequeño y tenía fondo para algunas actividades más, entre ellas un pequeño trabajo en una sala de cine administrada por el padre de uno de sus amigos. “Tenía que estar de pie mucho rato, me daban unos calambres horribles, pero no me arrepentía de haber jugado tanto ese día”, contó al respecto el ‘Nene’ en una entrevista de 2017.
Aunque en más de una ocasión Teófilo Cubillas haya insistido en que su verdadera profesión es la de contador, carrera que estudió en la Universidad Villarreal, desde aquellos primeros años era claro que el fútbol iba ser el centro de su vida futura.
Como él mismo ha contado, su vida cambiaría en 1964 cuando su Huracán Boys jugó un encuentro amistoso contra los juveniles de Alianza Lima. Los ‘potrillos’ se impusieron por un contundente 7-1, pero Cubillas anotó el único gol de su equipo. Rafael ‘Cholo’ Castillo, histórico descubridor de talentos del cuadro victoriano, tomó nota de su desempeño y lo invitó a jugar con Alianza. “Ese encuentro lo ganamos 6-0. Yo anoté los seis”, relató el ‘Nene’ a RPP en 2018.
Ya desde Puente Piedra, el joven Teófilo era hincha blanquiazul y el llamado fue un sueño hecho realidad. “Yo quería ser Pitín Zegarra. Y me enamoré del club”, declaró a la revista DT de El Comercio hace algunos años. En la misma publicación, el exfutbolista explicaba que Pedro 'Perico' León, otro de sus ídolos, fue quien lo bautizó como 'Nene'.
A partir de entonces, su historia sería casi indivisible de la de Alianza y lo algo muy similar sucedería con la selección peruana. Cinco goles y partidos memorables le dieron al 'Nene' el apodo con el que la FIFA lo reconoce en incontables notas: “El Pelé de Perú”. Todo porque O Rei tuvo claro que ese chico con cara de niño y un talento que lo llevó al Olimpo del fútbol podría ser su sucesor. Eso lo dijo cuando Cubillas ganó el premio a Mejor jugador joven en México 70. Y desde entonces su fama precedió cualquiera de sus actos.
- Figuras emergentes -La irrupción de Cubillas en el fútbol peruano se produjo en una época en la que este último gozaba de una generación notable de futbolistas, pero la atención que genera su figura puede rastrearse algo más atrás en el tiempo, en la primera mitad del siglo XX.
“La prensa siempre está buscando al sucesor de Alejandro Villanueva”, explicó el periodista e historiador Jaime Pulgar Vidal por la vía telefónica a este medio. Más allá de su innegable peso en la historia del balompié nacional, el paso del tiempo –quizá de forma injusta– ha dejado algo de lado a la figura de ‘Manguera’ como modelo de futbolista que gusta al peruano, siendo el 'Nene' quien ha ocupado ese sitial a ojos de muchos.
“Es el futbolista que esperamos que aparezca siempre, pero lamentablemente pasan años y no encontramos ese tipo de jugador”, sostiene Pulgar Vidal. El investigador cita como un ejemplo lo que sucedió con Julio César Uribe e incluso a Yordy Reyna, quienes, más allá de la obvia distancia entre sus carreras, experimentaron ser depositarios de la expectativa de los peruanos por ver un “nuevo gran jugador”.
“Nos gusta la picardía”, agrega Pulgar Vidal al respecto, para luego acotar que esto último, sin ser negativo, puede haber llevado a que se pasen por alto otros perfiles exitosos dentro del universo deportivo peruano.
Independientemente del debate acerca del perfil del futbolista local y un polémico presente ligado a la política, Teófilo Cubillas sigue siendo la unidad de medida para el talento de los jugadores peruanos. A fin de cuentas, el 'Nene' es un recordatorio viviente de aquellos tiempos en los que estuvimos “felices de la vida”.