Juan Aurich tiene todo a favor. Tiene tres puntos de ventaja, juega en su cancha y se mide en la última fecha con un rival directo por la cima del Torneo Apertura: la 'U'. Al equipo de Roberto Mosquera le basta un empate para salir campeón. Y armas tiene. Las suficientes, diría yo, para vencer a Universitario sin necesidad de sufrir. Aquí, tres razones para creer que Aurich ganará el Apertura.
1. LA LOCALÍA. Junto con la César Vallejo, el cuadro chiclayano es el mejor local del campeonato. Solo perdió una vez, 4-3 ante Sporting Cristal. Claro, fue un partido atípico. Carlos Lobatón anotó un golazo de media cancha y otro olímpico. Contra eso no se puede competir. Luego Aurich fue insuperable en Elías Aguirre. Ganó sus seis encuentros restantes. Anotó 22 tantos y recibió 9. Los de Mosquera se han adaptado perfecto al viento y a la cancha sintética. Su buena performance en Chiclayo viene desde el Torneo del Inca, en el que también ganó seis y cayó en uno.
2. PLANTEL CON VARIANTES. A diferencia de Universitario, Aurich tiene un importante plantel de jugadores. Mosquera puede jugar 4-4-2, 4-3-3 o 3-4-3, dependiendo del rival que le toque. Tiene los nombres para cambiar su sistema cuando se le antoje. Si juega con dos centrales, Harold Cummings (panameño, jugador de selección) va a la banca. Si alinea a tres zagueros, entra el centroamericano. En el mediocampo también tiene variantes. Tanto así que Juan Carlos Mariño es suplente. Arriba, igual. Pese a la salida de Roberto Ovelar, en la banca siempre está Osnar Noronha, delantero rápido, interesante, autor del gol del triunfo ante San Martín.
3. EL JUEGO. Mosquera ya lleva casi un año en el equipo chiclayano. Fue presentado en septiembre del año pasado tras la pésima campaña del español José Mari Bakero. Tuvo tiempo para plasmar su idea de juego y este año lo demostró desde el arranque del Torneo del Inca. El equipo norteño busca siempre el juego en corto, las paredes, el buen fútbol. Nunca especula. Siempre va hacia adelante, pero sin desesperarse. Se toma su tiempo para elaborar y encontrar los espacios. Rengifo es el pívot, Pacheco va por la izquierda y tras salida de Ovelar es Neka Vílchez quien asume la posición de extremo. Pueden combinar por el centro o culminar la jugada por fuera con centro al 'Charapa'. Es raro que en un partido el Aurich no genere situaciones de gol.