Tendencia en Twitter aunque no juega hace 13 años, Chemo del Solar es triturado ante cada derrota de la ‘U’. Lo menos grosero que le exigen las redes sociales es que se vaya. Lo otro es irreproducible. ¿Es posible que el director deportivo del club sea el único responsable de un año salir campeones (el 2014), de la racha de siete partidos sin ganar en la temporada o de que Luis Fernando Suárez todavía no encuentre un equipo que funcione? No, el único no es. Son culpables los administradores que pasaron por creer que el club era solo una empresa y no una empresa de fútbol. Culpables los socios que perdieron presencia, voz y voto. Y responsables los jugadores que perdieron nivel o nunca lo tuvieron.
¿Cuál es la responsabilidad de Chemo, entonces? Sus poderes en la ‘U’ son claramente decisivos. Fue, con Julio Pacheco como presidente, el técnico que aceptó sueldos delirantes para Fano, Vitti y Morel Rodríguez, y también el entrenador que manejó con modos de terapeuta el final de un 2011 que pudo terminar con el descenso de Universitario. Es, desde la época de Right Business, un permanente asesor de los administradores en búsqueda de técnico y jugadores, que en 2013 cerró con el último campeonato. Y está, desde su cargo de director deportivo con la nueva administración, encargado de armar (y reorganizar) un plantel que nunca peleó ninguno de los tres torneos del año pasado y solo pudo clasificar a la Copa Sudamericana, en un discreto sexto lugar. Ya no es técnico, pero claro que ha dirigido todos estos partidos. Cuando creyó en Ibáñez y falló y ahora que convenció al mundialista Suárez, por ejemplo.
Más que con el juego del equipo en los últimos años, por encima de si Ampuero tira centros de baby fútbol, a Del Solar hay que vigilarlo por su conocimiento del estado administrativo de la ‘U’, que es donde él trabaja y es a partir del cual decide políticas en favor del grupo. Como a los dirigentes que alguna vez trabajaron con Alarcon en Alianza, a Del Solar lo perseguirá siempre el estigma de haber protegido desde el banco un régimen –el de Pacheco- que acabó por destrozar la estabilidad económica de una institución que, al borde de la ruina, tuvo que someterse al Proceso Concursal de Indecopi y todo lo que eso significa. Si decide irse, casi nadie va a extrañarlo. El problema es que eso no garantiza que la ‘U’ complete, como si se tratara de un truco de magia, tres triunfos seguidos.
Su vigencia en la ‘U’ se sostiene desde entonces. Llegó y se quedó por decisión de los administradores –Right Business, Bravo y Leguía- que promovieron esta crisis financiera y deportiva. Chemo del Solar tiene responsabilidad desde las oficinas en las que se decide todo el proyecto deportivo de la ‘U’. Del técnico que asume. Del fichaje de los jugadores y sus reemplazos. Del caso Raúl Fernández y del caso Rainer Torres. De los sueldos que se pagan y los excesos que se permiten. Pero culparlo del nivel de Edison Flores por tantos meses, de que Andy Polo no tenga pretemporada o Christofer Gonzales haya perdido el protagonismo del 2013 es, sencillamente, leer solo el titular de los diarios y no la nota completa. Ver apenas la puerta de la casa y no lo que está pasando adentro.
Así como en los campeonatos nadie corre a abrazar primero a Ferrari o Barco, ni se les pide un autógrafo y ni siquiera salen en las fotos, en las derrotas los primeros responsables también son otros.
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Luis Fernando Suárez explotó: “No soy mago para cambiar todo tan rápido en #Universitario” ⏩ http://t.co/PxWj8qmq5x pic.twitter.com/jCyUgAubcx— DT El Comercio (@DTElComercio) Mayo 11, 2015
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