El partido se había ido al tiempo extra. Dallas Mavericks como los Golden State Warriors querían ganarlo y el mínimo error entre ambos marcaría distancias entre ambos equipos. Fue así que en los últimos segundos, un jugador de los Warriors roba el balón y cede el balón a Stephen Curry, quien en unos segundos hace un tiro de dos puntos y encesta. Así es de emocionante la NBA.
La canasta enfrío todo el estadio de los Mavericks, dado que este equipo cayó al noveno lugar de la Conferencia Este a medio juego de distancia de los Memphis Grizzlies y Phoenix Suns. Los Warriors, por su parte, se mantienen en el sexto lugar con un récord de 46-28.
Stephen Curry fue la figura de su equipo al marcar 23 puntos y dar 10 asistencias, mientras que Dirk Nowitzki, en el otro bando, anotó 33 puntos y obtuvo 11 rebotes. Otra de las figuras fue Monta Ellis (Mavericks) con 27 puntos.