El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, advirtió el martes que la pandemia de coronavirus puede ser incluso más devastadora para las aerolíneas que las consecuencias de los atentados del 11 de setiembre de 2001.
“Esto es peor que el 9/11 para la industria del transporte aéreo”, dijo Mnuchin en una conferencia de prensa en la Casa Blanca, cuando muchas aerolíneas dejan sus aviones en tierra por los cierres de frontera impuestos para tratar de detener la pandemia.
- Gremios plantearán al Ejecutivo medidas para compensar impacto de suspensión de llegada de vuelos
- Air Europa reducirá la jornada laboral y suspenderá los empleos de los trabajadores ante impacto del coronavirus
El lunes, las compañías aéreas solicitaron una ayuda de US$ 50.000 millones al gobierno federal para capear el temporal.
COMPAÑÍAS AÉREAS PIDEN AYUDA ANTE CRISIS
Las aerolíneas del mundo claman por ayuda para sobrevivir a la crisis generada por la pandemia del nuevo coronavirus, que obliga a mantener a sus aviones en tierra. El temor generalizado, los cierres de fronteras y las prohibiciones de viajes llevaron a anular unos 185.000 vuelos.
Es una “situación sin precedentes” y “nadie sabe cuánto durará ni cuál será su impacto”, estimó Brendan Sobie, analista independiente del sector basado en Singapur.
“Para fines de mayo de 2020, la mayor parte de las compañías aéreas del mundo irán a la quiebra”, alertó por su lado la firma de análisis de mercados CAPA.
Frente a estas sombrías perspectivas, las aerolíneas esperan ser rescatadas por las autoridades, de la misma forma que se rescataron a los bancos durante la crisis global de 2008.
Las compañías aéreas estadounidenses, que debieron suspender millones de vuelos y rutas transatlánticas, así como congelar los pedidos, necesitan US$ 25.000 millones en forma urgente y otro tanto en créditos a corto y mediano plazo.
“Debemos apoyar a las compañías aéreas. No es su culpa”, dijo el presidente estadounidense Donald Trump en la Casa Blanca, sin anunciar medidas concretas.
Esta crisis también podría conducir, en el largo plazo, a cambios para los usuarios y a “un aumento de tarifas porque las compañías intentarán compensar sus pérdidas”, advirtió Shukor Yusof, analista de la consultora aeronáutica Endau Analytics, de Malasia.