El primer semestre del 2019 siguió siendo complicado en términos de rentabilidad para las ‘telco’. Así lo reportaron en sus resultados financieros. Y aunque todos manifiestan que continuaron con la indispensable inversión en el despliegue de fibra y torres, esta no fue al ritmo del 2017, cuando solo el montado de antenas 4G creció más de 400%.
En fibra, todos se han expandido un poco este semestre. Movistar agregó 452 km de fibra a los 32.000 km que afirma poseer; Bitel ha sumado 590 km a los 34.600 km que tenía, y Entel sumó 1.555 km desde enero del 2018. En tanto, Claro indica que ya llegó a los 17.000 km y avanzó 75% el tendido de red en la región Lima (proyecto Fitel).
►Polémica propuesta de “ley telecom” entra en revisión►El gran reto del 2019 para el sector telecomunicaciones será normativo►Recomiendan que no se mantenga a Pronatel como operador temporal de Internet
En antenas, el avance ha sido un poco más tímido. Según los reportes de Osiptel, al primer trimestre se tenía con cobertura 4G un total de 20.400 centros poblados, es decir el 20% de la base (99.9 mil), cifra muy cercana a lo reportado al cierre del 2018.
Haciendo una comparación con los reportes oficiales del MTC y Osiptel de diciembre 2018 y los actuales, se observa que son centenas y no miles la cantidad de nuevas antenas 4G instaladas por el operador. Movistar pasó en tres meses, por ejemplo, de 4.136 sitios 4G a 4.376, es decir un promedio de 2,6 antenas 4G por día.
La cifra es positiva si miramos el ámbito urbano, en donde se tiene un 99% de cobertura 3G y 87% de 4G, según Osiptel. En dichos mercados, los analistas y los operadores coinciden en que el reto es elevar el consumo, pues según GSMA, casi la mitad de los que están en zona con cobertura no usan Internet móvil, y deben prepararse para migrar al 5G.
El otro gran pendiente está en el ámbito rural, en donde quedan más de 44 mil centros poblados que están totalmente desconectados.
EL GRAN DESAFÍOLa brecha por cubrir en términos de antenas o estaciones bases (torres en donde se ubican varias antenas) para dar cobertura a la mayoría del país y estar listos para la nueva generación móvil (5G)varía según la fuente. Osiptel habla de sumar, al menos, 15.000 a las 21.000 existentes y AFIN las calcula en el doble para el 2025.
Para el Centro de Estudios de América Latina, el déficit para Perú está calculado en US$35.000 millones, incluyendo fibra óptica y antenas, precisa Maryleana Méndez secretaria general de Asociación Interamericana de Empresas de Telecomunicaciones (Asiet).
Si no se pisa el acelerador y no se logran dar facilidades para el despliegue de infraestructura a unos operadores que están entre los de menores niveles de ganancia del mundo, advierte Méndez, se corre el riesgo de ampliar la brecha digital país.
Las ‘telco’ deben prepararse porque las inversiones requeridas en un año hoy equivalen al total realizado en los últimos siete años, dado que la red 5G es más costosa, remarca. ¿Existen trabas que impidan montar 6.000 antenas por año o 16 por día para nivelarnos?
Más allá de proyectos como el de IpT (BID, CAF, Facebook y Telefónica) que logra conectar con 4G a unas 27 localidades rurales por día, falta poder hacer más. Las ‘telco’ coinciden en que aún persisten los problemas con las municipalidades que incumplen la ley.
Un procedimiento realmente estándar y mayores campañas de difusión sobre los beneficios de las redes serían de gran ayuda, aseguran.