Bloomberg.- Arca Continental, la segunda mayor embotelladora de Coca-Cola en América Latina, busca adquisiciones en Sudamérica y la región fronteriza entre los Estados Unidos y México en el marco del intento de alcanzar su meta de ventas de 2017.Follow @PortafolioECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Luego de una transacción de US$910 millones por la peruana Corp. Lindley SA, Arca Continental tiene que ingresar a nuevos mercados para aumentar sus ingresos un 18 por ciento en dos años respecto del pronóstico de ventas de 2015 de 85.000 millones de pesos (US$5.000 millones), dijo en una entrevista Ulises Fernández, el jefe de relaciones con los inversores. Si bien la compañía, que tiene sede en Monterrey, México, mantiene constantes conversaciones con embotelladoras, Fernández no dijo cuándo podrían anunciarse posibles adquisiciones.
“Uno de los focos principales son los territorios donde ya operamos”, dijo Fernández el martes, y mencionó a Perú, Ecuador y el norte de Argentina como áreas donde Arca mantiene una fuerte presencia. “Todos los que son territorios contiguos son parte de nuestra estrategia de crecimiento”.
La adquisición de Lindley fortalece una década de adquisiciones de Arca en Latinoamérica, una región que consume más refrescos que cualquier otra en el mundo, en momentos en que la compañía compite por territorio con Coca-Cola Femsa SAB, que tiene sede en Ciudad de México. Es probable que las compañías mexicanas rivales pongan ahora la vista en las embotelladoras chilenas, según Credit Suisse Group AG y corporativo GBM SAB.
OPORTUNIDADES EN ESTADOS UNIDOS
Los territorios de distribución en los Estados Unidos también podrían complementar la fortaleza actual de Arca en el norte de México, dijo Fernández. El año próximo podrían surgir las oportunidades de compra en los estados fronterizos estadounidenses a medida que Coca-Cola Co. reorganiza sus operaciones de embotellado, agregó.
Los accionistas de Arca aprobaron la transacción de Lindley en una votación del martes, dijo la embotelladora en una declaración. Arca acordó pagar a la familia Lindley US$760 millones por el 53 por ciento de las acciones con derecho a voto en Corp. Lindley. La embotelladora mexicana pagó otros US$150 millones a cambio de la promesa de la familia de retirarse de forma permanente del sector de embotellado, según un informe presentado a organismos reguladores mexicanos.