(Bloomberg) - Recluidos en el interior de la sede de Target Corp., en las afueras de Mineápolis, un equipo de investigadores se ha pasado el verano intentando responder lo que debería haber sido una pregunta sencilla: ¿de qué estaban hechas en realidad cientos de miles de sábanas de la cadena?Follow @EconomiaECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Lo que descubrieron ha minado la confianza mundial en un producto de lujo y desencadenado una salva de demandas colectivas, que han creado un desafío de relaciones públicas de tamaño extragrande para la industria textil hindú y las compañías de EEUU a las que suministran.
Resulta que algunos de los principales vendedores estadounidenses, entre ellos Target y Wal-Mart Stores Inc., han estado vendiendo sábanas supuestamente hechas de algodón egipcio a precios de lujo, pero en realidad estas podrían estar mezcladas con algodones de menor calidad.
Tres de las demandas que buscan ser clasificadas como colectivas se han puesto contra el proveedor Welspun India Ltd., y otra, por separado, se dirigió a Wal-Mart la semana pasada. La queja, puesta en Nueva York por la clienta Dorothy Monahan, acusa al mayor vendedor al por menor del mundo de haber cuestionado el contenido de las fibras utilizadas por Welspun en sus productos desde 2008, sin haber detenido las ventas hasta que lo hizo Target en agosto. Wal-Mart ha declarado que se “defenderá enérgicamente”.
El resto de demandas, todas iniciadas en EEUU contra Welspun, alegan que la empresa ha etiquetado fraudulentamente como algodón egipcio su ropa de cama. Welspun ha declinado comentar las acusaciones. El director de gestión Rajesh Mandawewala dijo a los analistas, en el transcurso de una conferencia telefónica que tuvo lugar en agosto, que “el error ha sido nuestro, así que debemos responsabilizarnos de él”. Target, entretanto, no ha sido demandada.
“El marketing ha creado en nuestras cabezas la imagen de que el algodón de alta calidad y Egipto son sinónimos”, ha declarado Louis Rose, consultor de la industria algodonera de Memphis, Tennessee. “Los consumidores deberían ser escépticos ante estas afirmaciones. Ahora, el escrutinio será más intenso”.
Target ha cortado lazos y finalizado sus negocios con el proveedor hindú, que ascendían a US$90 millones anuales, y Wal-Mart Stores ha dejado de vender las sábanas de Welspun etiquetadas como 100 por ciento algodón egipcio. Bed Bath & Beyond Inc. hizo otro tanto el lunes, reduciendo las acciones de Welspun hasta un 4,5 por ciento menos en Mumbai al día siguiente. Con estos significativos golpes por parte de algunos de sus principales clientes, las acciones de Welspun se han desplomado más de un 40 por ciento desde el 19 de agosto, cuando Target anunció su decisión.
El episodio de las sábanas de falso algodón egipcio salió a la luz tras un exhaustivo trabajo por parte de los investigadores de Target, que analizaron las fibras de las sábanas mediante microscopios y trazaron su viaje a través de una cadena de distribución mundial. La investigación descubrió que 750.000 de las sábanas de “algodón egipcio” de Target, que se vendían por US$75 cada una, no contenían algodón egipcio en absoluto, sino una amalgama de fibras de menor calidad de fuentes más baratas.