El Perú debe sentirse orgulloso por su perspectiva de crecimiento económico frente a otros países que enfrentan el ciclo negativo de la economía mundial, opinó el presidente de la Confederación de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep), Alfonso García Miró.
Agregó que los indicadores macroeconómicos del país son positivos, lo cual debería servir de motivación a todos los sectores involucrados en el desarrollo para pensar en cómo pueden mejorar a fin de lograr mayores niveles de competitividad.
“El hecho de venir discutiendo si la economía crece entre 5 y 7 por ciento, en un año en que todos tienen decrecimiento, y las naciones de la región latinoamericana presentan tasas menores que las de Perú, de por sí ya debería llenarnos de orgullo y optimismo”, comentó.
García Miró mencionó que el crecimiento económico básicamente depende de tres factores: variables que pueden controlarse, como por ejemplo, medidas tributarias que impulsen las inversiones del sector privado.
En segundo lugar, los factores externos que no pueden controlarse, como la caída de precios internacionales o la crisis económica mundial, ante lo cual planteó planes de contingencia para enfrentar “súbitos movimientos”.
MOTIVADOS POR EXPECTATIVAS Y como tercer factor, sostuvo que la economía se encuentra motivada por las expectativas, de tal forma que la población en su conjunto confíe en la buena conducción económica y en las perspectivas de crecimiento sostenido.
“Los líderes de opinión, las autoridades, los representantes de gremios, debemos transmitir la mayor sensación de confianza a todos los ciudadanos del Perú porque esa confianza y esa sensación de optimismo es lo que va a motivar a millones de peruanos”, aseveró.
El representante de la Confiep argumentó en Radio Nacional que esa motivación servirá también para tomar decisiones como la compra o no de un producto, el monto de un ahorro, la voluntad o no de invertir, entre otros, todos ellos factores que dinamizan la economía de un país.