Un consorcio conformado por la peruana Graña y Montero Petrolera y una filial de la alemana Oiltanking ganó la licitación para administrar cinco terminales de almacenamiento de combustible de la estatal Petro-Perú por un periodo de 20 años, informó hoy un portavoz de la compañía.
El grupo se comprometió a invertir US$37 millones en los terminales, cuatro de ellas ubicadas en el norte y la restante en el centro del país, dijo un portavoz de la matriz Graña y Montero, la mayor empresa constructora del país.
Asimismo, el consorcio realizará una “inversión adicional reembolsable” de US$190 millones en los terminales en un plazo de 15 años, que serán recuperados mediante los descuentos en la retribución a pagar a Petro-Perú por la gestión de las terminales, agregó.
De las cinco terminales la más grande es la Terminal Centro del Callao, ubicada en el mayor puerto del país.
Otros cinco terminales de Petro-Perú, ubicados en el sur del país, no recibieron oferta en la licitación. Estos terminales son operados desde 1998 por privados, en contratos de operación similares a los recientemente adjudicados.
La licitación de los terminales se produce en momentos en que Petro-Perú ha iniciado un proceso de modernización en Talara, su principal refinería ubicada en el norte de Perú, con una inversión total de hasta US$ 3.500 millones.
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