La segunda ronda de negociaciones para que el Perú y Turquía alcancen un TLC tuvo un balance positivo, según afirma Edgar Vásquez, viceministro de Comercio Exterior del Perú.
Esto, debido a que se cerró la mesa de cooperación y se lograron avances en las mesas obstáculos técnicos al comercio (OTC), defensa comercial, acceso a mercado y reglas de origen. Estas últimas son las que presentan mayor dificultad,
“La realización y término de esta segunda ronda de negociaciones del TLC muestra la voluntad tanto del Perú como de Turquía de llegar a un acuerdo, a pesar de las difucultades políticas que Turquía atravesó hace unos meses”, declaró Edgar Vásquez a El Comercio.
De acuerdo con el alto funcionario peruano, el capítulo de cooperación que se logró cerrar crea el marco general para que ambos países generen programas de cooperación en educación, energía, promoción del comercio, entre otros puntos que permitan estrechar los lazos entre ambos países a pesar de la gran distancia geográfica que los separa.
Se debe de tener en cuenta que este acuerdo es muy particular, puesto que al ser el país euroasiático un estado asociado a la Unión Europea (UE), pero no miembro pleno, forma parte de la unión aduanera de este bloque, por lo que tiene que darnos las mismas preferencias arancelarias que tenemos con la UE, salvo en productos agrícolas frescos y congelados.
Turquía tiene una población de 74,9 millones de habitantes, con un PBI per cápita de US$10.946 millones. En el 2013 el país euroasiático registró un crecimiento de 4% y alcanzó un PBI de US$820 mil millones. “Lo cual constituye una potencial fuente de demanda de nuestras exportaciones”, afirma Eduardo Ferreyros, gerente general de Cómex Perú.
TEMAS SENSIBLES
Al ser consultado si es que el Perú excluiría de la negociación al sector textil-confecciones por ser muy sensible para el país, el viceministro dijo que aún no se puede hablar de exclusiones, toda vez que siguen negociando el tema.
“Nosotros hemos puesto sobre la mesa nuestra propuesta sobre la mesa en el tema agrícola y los turcos sobre el tema textil y seguiremos dialogando al respecto”, respondió el viceministro.
Se debe de tener en cuenta que Turquía es uno de los principales proveedores de la UE en el rubro textil-confecciones, debido al diseño y acabado, además de los precios influido por el flete reducido y la rápida respuesta que le permite la cercanía geográfica al bloque.
INVERSIONES
Pero las negociaciones de este TLC no se limitan solo al intercambio de bienes y a la cooperación para que este sea más fluido, sino que también busca sentar las bases para que haya una promoción de inversiones en uno y otro país. “Este tema lo hemos incluido dentro del capítulo de servicios”, precisa el viceministro Vásquez.
Aunque si bien es cierto, el acuerdo creará el marco general para que el flujo de inversiones crezca, es necesario que ambos países negocien un acuerdo que evite la doble tributación, tal como lo hizo notar Eser Avunduk, presidente del Consejo Empresarial Turco-Peruano a fines de marzo del año pasado.
Este acuerdo que evite la doble tributación debe ser negociado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y ser aprobado por el Congreso de la República, estos requisitos son necesarios porque el país dejaría de recaudar tributos, pero generaría empleo y la industria ganaría competitividad.
El principal sector en el que Turquía podría desarrollar inversiones en el país es en el de la construcción, rubro en el cual tiene una gran experiencia y una muestra de ello es el siguiente dato: seis constructoras turcas se encuentran entre las 100 más grandes del mundo. Un dato adicional, pero no menos importante, es que el 70% de las 200 mil empresas del sector se dedica a la construcción de obras de infraestructura pública como centrales de generación eléctrica a gas natural, represas, carreteras, hospitales, puertos, aeropuertos entre otras.
Dentro del rubro de la construcción, empresas turcas como Yüksel, la tercera más grande del país euroasiático, podrían venir al Perú a participar en la construcción de viviendas sociales, pero para ello, tal como lo señaló a El Comercio el año pasado Kaan Sert, gerente de Desarrollo de Negocios de la compañía, es necesario que el Estado tenga megaproyectos para que les resulte atractivo.
Esta y otras razones más hacen del TLC con Turquía bastante prometedor y se espera que en la tercera ronda de negociaciones, cuya fecha aún no ha sido fijada y debe ser realizada en Ankara, la capital del país euroasiático, se den avances más significativos. Por lo pronto se espera que cerremos un acuerdo a mediados del 2015. Habrá que estar atentos a las oportunidades que se generan.