FERNANDO GONZÁLEZ-OLAECHEA T. / @fernando_got
Clara Manco, con siete meses de embarazo, abandonó ayer del Policlínico Municipal de Lince como entró, en una silla de ruedas. La pierna derecha, sin embargo, la tenía diferente: un yeso la cubría.
Ayer recién pudo atenderse el esguince causado por caer el lunes a un buzón sin tapa de Telefónica en el cruce del jirón Lampa y la avenida Nicolás de Piérola, en el Cercado de Lima. Afortunadamente, la caída no le causó ningún problema al bebe que espera. Manco contó que cuando llegó a su casa, por la tarde, recién Telefónica se comunicó con ella.
“Yo soy padre y madre de mis hijos y ahora no puedo hacer nada por 20 días”, dice desde su casa. Fuentes de Telefónica informaron que no pudieron contactarla antes porque ni a través de los bomberos ni en el hospital San Bartolomé obtuvieron su dirección.
Clara Manco dijo que la representante de Telefónica que fue a su casa le ofreció atención médica completa, pero ella todavía no la acepta porque siente que es suficiente con el yeso y la ecografía que se hizo ayer en la otrora Maternidad de Lima.
Además del tema de la salud, a la mujer le preocupa el sustento de sus hijos. Trabaja en una pequeña productora de eventos para niños, pero ahora debe guardar completo reposo por tener la pierna enyesada y, además, por su embarazo.
Desde Telefónica se supo que debido a un seguro con el que cuentan, pueden correr con todos los gastos médicos y de rehabilitación que sean necesarios. Clara prefiere una indemnización por el tiempo que no podrá trabajar, pero el tema aún no se ha discutido. Hoy volverán a conversar.
Cuando Clara cayó, iba a una cita al hospital para ver un quiste que tiene el bebe por nacer, pero este mal que no ha sido relacionado con el accidente.
Pero con todo, esta madre alberga una satisfacción final: quien cayó al buzón fue ella y ninguno de sus hijos salió lastimado.
MERCADO NEGRO COMERCIA TAPASGANAN MILLONESHasta S/.1,2 millones gana el mercado negro por la venta del fierro fundido que se obtiene de las tapas de buzones robadas. En 11 depósitos de la zona chatarrera de Tacora se funden las tapas. El año pasado se robaron más de 3 mil tapas.