Luego de la difusión de la denuncia sobre una supuesta discriminación contra Jenny Trujillo por ser homosexual–cuando intentaba donar sangre en la Clínica Anglo Americana–, el Ministerio de Salud (Minsa) ha dispuesto acciones a fin de modificar su actual normativa sobre donantes.
El formulario que estos deben llenar en todos los centros de salud del Perú consigna una pregunta sobre su orientación sexual. En tal sentido, el Minsa considera a homosexuales, bisexuales y trabajadores sexuales como grupos de riesgo, a los que se les impide donar sangre. Ello se establece en la resolución ministerial 614-2004 del 15 de junio del 2004.
No obstante, de acuerdo con este ministerio, los formatos actualmente usados para este procedimiento “serán revisados y se modificarán aquellos aspectos que puedan interpretarse como discriminatorios de los derechos y libertades individuales de los ciudadanos”.
Así, el Ministerio de Salud se adecuará a la normativa internacional, que establece que la orientación sexual no constituye riesgo para donar sangre.
Desde la Organización Panamericana de la Salud (OPS) ya se había criticado la norma peruana vigente. Su representante, Manuel Pérez Escobar, calificó de absurdo impedir a las personas que donen sangre por su orientación sexual.
Pérez precisó que en México, Argentina, Chile y Uruguay no existe esta limitación a la hora de donar. En la nueva norma ya no se considerará la orientación sexual como una limitación para ofrecer la donación.