Inspectores municipales le impusieron decenas de multas a Alberto Villarreal Tasayco, el peor conductor de Lima, pero nunca fue posible internar su vehículo en el depósito.— ¿Por qué este sujeto conducía un vehículo con varias órdenes de captura? ¿Por qué le imponían multas que contemplan el internamiento, pero nunca se concretaba el envío al depósito?Es porque a veces el depósito está lleno o no hay grúa. Lo que uno hace es juntar este tipo de infracciones y como la medida preventiva no se pierde, y se mantiene en el tiempo, entonces se puede emitir una resolución y se ordena el internamiento. [En el caso de Villarreal] ya hemos dispuesto que se prepare la resolución ordenando la medida preventiva y eso se le oficiará a la policía para tener una orden de captura.
—¿Qué hay con el sujeto? ¿Se puede impedir que él consiga otro vehículo para seguir al volante?Esta persona no está registrada como conductor; por lo tanto, no debería conducir vehículos de ninguna clase. Al no ser una persona registrada, podemos coordinar con la policía y el Ministerio Público porque aquí cabe una intervención directa, ya que persona que conduzca debe hacerlo con licencia. Esta persona, en contacto con cualquier vehículo, puede ser intervenida bajo las facultades del Ministerio Público.
— La labor de informar a la policía para que se lleven el auto al depósito, ¿no debería realizarse al mismo momento de la intervención, y no dejarlo huir?Las situaciones en el campo son variadas. A veces hay demora por el tráfico y, en ese momento, no se puede detener todo el tránsito en vías tan complicadas como la Panamericana Norte. O está el depósito lleno. No se puede detener el vehículo en la vía pública. Hay que ver que no seamos más un problema que una solución. Pero la medida preventiva no se pierde.
— La empresa Autogol Tours, a la que el auto de Villarreal está afiliado, ofrece el servicio legal de impugnaciones y anulaciones de papeletas. Es decir, inscriben y le limpian todo el historial al taxista para que sus multas estén congeladas. Efectivamente. El negocio del servicio de taxi está orientado a servir al pasajero, mas no para negocios colaterales. Debido a una modificación en la ordenanza de taxis en el año 2013, se cerraron en ese momento las inscripciones para los choferes. Se pensó que cerrándolas se iba a detener el incremento de la oferta de servicio, y ahora solo se permite hacerlo a través de las empresas de taxi. Yo me imagino que lo hicieron con una buena intención de que se mejoren las condiciones de los vehículos que entran, pero cerrar el registro más bien consiguió lo contrario. Lo que se genera es un negocio negro.
— Queda claro que esta norma debe cambiar...Detectado esto, notamos que el negocio ya no es de calidad, y hemos propuesto una modificación a esta ordenanza. Con la actual norma, en vez de que no haya informalidad, esta se ha incrementado, con el problema adicional de que no sabemos quién está detrás, más los negocios turbios. Uno de los cambios es la apertura del registro de taxi; y otro que el conductor pueda retirase. El tercer gran cambio es registrar si la empresa o el vehículo utiliza aplicaciones de taxi. Queremos conocerlos.— ¿Cómo va el trabajo de fiscalización?Hemos dividido Lima en cinco zonas geográficas, contratando a cinco comandantes de la policía en retiro con un equipo de inspectores, asignados a distritos. Así, el comandante sale con su equipo simultáneamente en zonas distintas en coordinación, como una red de equipos. El trabajo aislado de cada distrito no ayuda. Con esa estrategia conjunta hemos aumentado 30% las intervenciones. En lo que va del año, se han impuesto 45.800 actas [infracciones].