Una de las piezas más interesantes de “Bifurcación imaginaria”, reciente exposición de la artista peruana Eli Bedón, es una pintura de gran formato que muestra una pared cruzada de arriba abajo por una grieta. No hay mucho más que eso, pero aquella hendidura sobre el muro terroso ofrece –como dice el título de la muestra– una apertura hacia múltiples posibilidades especulativas.
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Todos los demás cuadros de la exposición en la galería Forum guardan correspondencia al ya descrito. Son imágenes en tono sepia de una casona en ruinas, y solo en algunas hay presencia humana: la enigmática aparición de un personaje andrógino, con traje de seda y rostro pintado a la manera de una geisha.
“La muestra fue ideada en el 2017, hicimos una sesión de fotos con este personaje que deambulaba por la casona abandonada”, cuenta Bedón sobre cómo se originó su proyecto. “Luego fue pasando el tiempo y el personaje comenzó a difuminarse. Me interesó más lo que pasaba en los bordes, menos nítidos. Pero la idea era seguir hablando de la ambigüedad”, agrega.
“Yo siento que el trayecto de la muestra es como un cuento. Entra el personaje y de ahí tienes esos espacios de la casa. Todos los escogí porque tienen divisiones en el centro y hay una apertura hacia algo más, lo que sucede más allá de eso”, detalla la artista.
LARGO VIAJE
Aunque en los últimos años ha expuesto en varias colectivas, “Bifurcación imaginaria” es la segunda muestra individual de Bedón luego de 14 años, desde que presentó “Youth” en la galería Vértice. “Por ese entonces me interesaba mucho el tema de la juventud, de esos personajes que rápidamente alcanzaron la gloria y la decadencia. Angie Jibaja me fascinaba. Amy Winehouse también”, cuenta.
El personaje protagonista de “Bifurcación imaginaria” –que interpreta el fotógrafo Inon Sani, travestido en prendas japonesas– guarda algo de eso. “Creo que nace un poco de las historias que me contaba mi papá, que era italiano y llegó a Sudamérica con la emoción y la confusión de la mirada exótica europea”, advierte Bedón.
Por lo demás, el proceso de trabajo de esta exposición le ha permitido a Bedón encontrar nuevas motivaciones y rumbos. “Empecé a perder el miedo a la pincelada. Comencé a soltar y a soltar –afirma–. Creo que lo que viene después para mí es algo más cercano. No sé si dejando lo figurativo totalmente, pero sí soltando mucho más”.
“Bifurcación imaginaria”, exposición de Eli Bedón con curaduría de Daniel G. Alfonso, se exhibe hasta el 6 de abril en la Galería Forum (Av. Larco 1150, Miraflores). Ingreso libre.
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