El Premio Nobel Mario Vargas Llosa ha recibido la Medalla de Oro de la Comunidad de Madrid de manos del presidente de esta institución, Ignacio González, en una ceremonia en la que el escritor peruano pidió a los galardonados que sigan haciendo de Madrid una ciudad “libre, culta, democrática y abierta”.
Con motivo de la celebración del Día de Madrid, González ha impuesto la Medalla de Oro y la Gran Cruz de la Comunidad a personas o instituciones que han destacado en sus trayectorias por su trabajo para los madrileños, por contribuir a la buena imagen de la región o por su vinculación con la misma.
Así, el escritor peruano y Premio Nobel de literatura Vargas Llosa (que reside en la capital varios meses al año) ha recibido la Medalla de Oro por su contribución a la cultura y por el “vínculo” que siente con Madrid, donde nació su vocación literaria.
Vargas Llosa, que ha recibido la Medalla con todo el público puesto en pie, expresó en nombre de todos los premiados “el profundo sentimiento de gratitud y emoción”.
El escritor ha recordado que cuando llegó a Madrid hace más de medio siglo halló una ciudad “pequeñita, provinciana, cerrada sobre sí misma, muy cortada del mundo desde el punto de vista informativo y cultural”, y ha subrayado cómo en unas décadas tanto Madrid como España se han transformado “de manera extraordinaria”.
“Ha sido la experiencia social y política más impresionante que me ha tocado vivir, ver cómo un país subdesarrollado pasaba a ser uno de los países más modernos del mundo, cómo un país sometido a una dictadura pasaba a ser un país democrático y libre gracias a un amplísimo consenso de sus ciudadanos”, remarcó.
Vargas Llosa dijo que Madrid es hoy “una gran ciudad” por su “rica vida cultural”, pero también por su “vocación cosmopolita e internacional”, que “abre los brazos” a todos, en la que “nos sentimos madrileños todos los que queremos serlo, hayamos nacido aquí o en otra parte”.
(Fuente: EFE)