En nuestro país Percy Céspedez es sinónimo de videos musicales. Ha trabajado con las disqueras Sony, Emi, Warner y Universal. En el 2010 fue nominado a un Grammy Latino, sus videos han alcanzado el primer lugar de MTV en más de una ocasión y ganó tres lenguas en los premios de la cadena estadounidense.
—Veo una enorme colección de discos en tu casa.Desde los 5 años. A esa edad ya sabía que quería pertenecer al mundo del entretenimiento. Los primeros videos que vi fueron a través de “Disco club”, de Gerardo Manuel. Uno era “Flash” de Queen, el otro “Another Brick on the Wall” de Pink Floyd y “Fame” de Irene Cara. Pero el primero fue el álbum de “Grease”.
—¿Hasta dónde te ha llevado tu colección?Lo primero que hice cuando comencé a ganar dinero fue viajar a Argentina, peinar todas las disqueras y comprar unos 130 discos. Luego peiné España, Chile, EE.UU. Otras cosas muy raras las cazaba por eBay. Hasta que me volví comprador compulsivo.
—¿Cómo superaste eso? Realmente no lo hice [risas]. Solo lo dosifiqué mejor. Pero es que colecciono muchas cosas: videos originales, películas, series de TV, CD, cómics, memorabilia de DC.
—¿Cuán grande es tu colección musical? Debo tener unos 15 mil CD y unos 60 mil videoclips. Debe ser la colección más grande de videoclips en el Perú. Además, cuando no encontraba los videos originales me he metido a canales de TV para sacar la grabación original. Ahora siento que ya tengo todo lo que más o menos me interesa: videoclips de 1975 al 2000 y música de 1920 hasta la actualidad.
—Hace cuatro años anunciaste que te ibas del país para dedicarte a vivir, hoy estás de vuelta... Sí. Me propuse conseguir un sueño cada día. Terminar mi colección es uno de ellos. Ahora vivo entre Lima, Nueva York y provincias porque tengo un problema con Lima, es muy estresante, muy salvaje, muy negativa. Por otro lado, crecí influenciado por la cultura estadounidense y cuando llegué a Manhattan recién supe que ese era el centro del universo.
—¿Por qué? Porque en cada esquina se ha grabado algo. Soy fanático de Jim Kelly, imagina bailar en las calles de Nueva York y que hasta te aplaudan. Lo último que hice fue cantar en el metro, estaba deprimido, había un tipo cantando, me vio, me pasó el micro y me puse a cantar. Nadie lo sabe, pero yo me metí a esta industria porque soy coleccionista y porque quería hacer los videos para mi banda, yo quería ser el artista. Por eso este año inicié una colaboración con Astronaut Project, para hacer el video que yo quería hacer para mí.
—Es un trabajo de mucho esfuerzo, pero de reconocimientos como los de MTV.Yo no podía creer que todas las semanas éramos número uno con cada video. Primero Vox, luego Zen, TK, Ni Voz ni Voto. Yo siempre supe que mi trabajo era bueno, pero la realidad te da un choque muy fuerte cuando todo lo que haces se dispara.
—¿Qué falta en nuestra industria musical para llegar al nivel de Colombia?Colombia es el centro más importante de exportación de música de este lado de la región desde 1999. La ruta de internacionalización es Colombia, México y Miami. Agarró fuerza porque salieron cuatro colombianos con fuerza: Aterciopelados, Carlos Vives, Shakira y Juanes.
—¿Eso nos falta entonces, cuatro pilares? Los tuvimos, pero no hubo cómo concretarlos. La triada fuerte de salida fue TK, Zen y Libido. Los tres estaban en MTV. En ese momento debió concretarse la firma con una disquera. Gian Marco, Pedro Suárez-Vértiz y Eva Ayllón formaron otra triada en los 90. Quienes debieron internacionalizarse fueron Los Hermanos Yaipén, les faltó asesoría. Otro momento muy fuerte fue el de Ádammo, le guste o no al público peruano crítico, afuera era un monstruo. Ahora Alejandro y María Laura me parece una propuesta increíble, sé que Turista está punteando como producto con miras al extranjero y a mí me encanta Astronaut Project.
—El Septeto Acarey y Tony Succar están nominados al Grammy Latino, otra gran oportunidad.La nominación al Grammy es algo que te cambia la vida. Es dificilísimo lograrlo, a mí me tomó por sorpresa y me enseñó que todo era legal. Ninguno tenía vara.
—Te molesta que sospechen que tienes vara... Hay quienes critican mi lema: “Mi vida es maravillosa”. Pero no entienden que es porque he tenido una vida de mierda. Al menos por 27 años. Y agradezco esos años de horror porque si no no habría estado preparado para soportar el éxito del mundo del espectáculo. Si te contara todo lo que he pasado...
—Cuéntanos... Tuve una niñez terrible por culpa de mi padre, me golpeaba, me torturaba psicológicamente. Cuando por fin se separó de mi madre nos abandonó en una casa sin puertas ni ventanas. Por eso fui pésimo en el colegio, sufrí de ‘bullying’ por los sueños que tenía, pero lo peor fue que mi madre no podía mantenernos y tuve que irme a vivir con mi padre. A los 16 años me apaleó con tablas de la cama, destruyó la radio que tenía. Tuve que escaparme, vivir en las casas de mis amigos. Regresé a Lima, me volví alcohólico porque me enamoré de una flaca que me sacó la vuelta con mi mejor amigo; artistas me engañaron con mis primeros trabajos. Hasta que a los 27 años quise acabar con mi vida.
—¿Cómo lo superaste?Me enfrenté al universo. Comencé a preguntarle por qué pasaba todo eso. Por qué era un bicho raro. No me lo merecía. Al día siguiente mi vida cambió, Vox era número uno en MTV y todo comenzó a salir bien. No sé cómo. La gente puede creer que soy distante o sobrado, pero la verdad es que soy bien tímido, nunca salgo de mi búnker porque no me entiendo con la sociedad limeña, solo salgo para irme al aeropuerto.
Director de videos musicalesNací en Lima hace 45 años pero de pequeño viví y estudié en Arequipa porque sufría de asma. Ahora soy un ciudadano del mundo, vivo entre Lima, Nueva York y el interior del Perú. Hace 12 años fundé la productora Elemental Visual Media.