Aunque su lanzamiento oficial fue en el 2012, el Proyecto de la Lama surgió en la mente de Rafael de la Lama y sus hermanos hace más de tres años. Si bien la elaboración de las canciones y los trabajos previos al lanzamiento del primer álbum originaron más de un debate, el concepto del grupo siempre estuvo claro: la prioridad eran las voces.
Los cantantes líricos son lo principal en este proyecto. Por eso (cuando nos escuchan) no se siente tanto como una fusión de estilos, sino como una propuesta contemporánea con elementos de rock, afirma Rafael de la Lama.
Su banda, que dista mucho a las que vemos usualmente en nuestro medio, está compuesta por un coro lírico de 40 personas y un grupo de solistas.
En base de esto trabajamos la producción musical. Los instrumentos y los músicos obedecen o se esclavizan al concepto vocal. Allí es donde se siente la novedad de la propuesta. Todo se amarra a los cantantes, explica De la Lama.
Por su parte, Elsa Morino, una de las solistas del Proyecto de la Lama, destaca la compatibilidad de los integrantes del grupo con géneros distintos al clásico.
Muchos de nosotros tenemos un alma rockera y esta es la primera vez que tenemos la oportunidad de combinar el canto lírico con algo que también nos gusta como es el rock, asegura la soprano.
El Proyecto de la Lama tuvo un gran reto a fines del año 2012: ser teloneros de Evanescence, uno de los grupos más famosos internacionalmente dentro de la fusión de lo lírico y lo contemporáneo. Su nueva aventura musical se producirá este 27 de setiembre con un gran concierto en el Gran Teatro Nacional. Las entradas ya están a la venta en TuTicket.