- Si caminas descalzo en piscinas y duchas públicas, entonces estás propenso a los hongos y al temible Pie de Atleta.
- La forma más sencilla de quitar el pelo enredado del desagüe
- Cómo sacar provecho a la cáscara de naranja en tu aseo personal
Si acostumbras a andar por la vida descalzo y tiendes a caminar por barro, tierra o piso húmedo, entonces los hongos son tu peor enemigo. Ya sea que tengas una piel morena y de buena genética, es mejor evitar el Pie de Atleta y las bacterias que vuelven a tu pies escamosos y enrojecidos, ¿Hay una forma de prevenirnos o disminuir los efectos?, En MAG te contamos sobre algunos hábitos para incorporar a tu vida.
Ten en cuenta que los pies están expuestos a las bacterias, virus y hongos que esperan por huéspedes desde el piso. Uno de los lugares en dónde proliferan con facilidad son las piscinas, saunas y duchas públicas al condensar la humedad y dar paso al hábitat de estos agentes patógenos de los que te hablamos, como la micoasis cutánea.
¿Cómo cuidar nuestros pies de los hongos?
No olvides que los hongos suelen manifestar sus dolencias a través de las uñas y la piel: picazón, ardor, grietas e inflamación en la dermis de pies son señales clásicas de alerta. Aunque pueden aparecer en otras partes del cuerpo, las extremidades bajas son particularmente sensibles a estos efectos.
Para evitar las odiosas ampollas y el hongo más popular llamado Pie de Atleta, en MAG te damos un listado de hábitos para interiorizar en tu día a día, especialmente si transpiras mucho al andar con calzado o tienes esta piel al intemperie:
- Mantén tus pies limpios y secos: procura lavar estas extremidades, al menos, 1 vez al día. Usa agua y jabón neutro entre los dedos y siempre sécate antes de colocarte calzados, esto evitará crear un ambiente apto para los hongos.
- Evita ir descalzo en lugares público: estos agentes patógenos están muy involucrados con la humedad y también las zonas cálidas. Además, suelen ser contagiosos entre los afectados. Es vital que te acostumbres a las chanclas o sandalias.
- Procura el cambio de calcetines y el calzado: es conveniente dejar airar y ‘descansar’ tus zapatos entre usos; trata cambiarlos regularmente, especialmente si sufres de sudoración excesiva.
- Desajusta los pasadores: si el interior de tus zapatos o zapatillas están ajustados, esto elevará la temperatura para dar pie a que los hongos proliferen. Puedes intentar vestir calzados a partir del cuero y usar medias de fibra sintética para mantener a raya la humedad.
- Ten tus uñas cortas y uniformes: si tu hábito de cortarte las uñas te genera heridas o lastiman las capas de tu piel, las bacterias de todo tipo tienen más facilidades para afectarte.
- Usa talco para los pies: trata de espolvorear el talco a tus pies diariamente, una vez estos estén secos y limpios. Hay algunos hechos especialmente para mantener alejados a los hongos; los puedes comprar en farmacias y no suelen estar caros.
- De hecho, hay polvos antimicóticos que se compran en las farmacias y que se aplican dentro del zapato; así tendrás los hongos a raya.
¿Este truco casero te pareció interesante y aprendiste un poco más sobre la limpieza y el cuidado de tu hogar sin invertir mucho dinero? Como este ‘hack’, hay otro tipo de utilitarios que serán de tu agrado. Te invitamos a conocerlos y ponerlos en práctica. Para ello, solo tienes que entrar en el siguiente enlace para más trucos caseros en Mag, y listo. ¿Te animas?
Contenido Sugerido
Contenido GEC