Las redes sociales han vuelto a ser el epicentro de una polémica. Un mensaje publicado en X (antes Twitter) por un profesor de la North Side High School de Fort Worth, en Texas, generó una investigación y diferentes reacciones. ¿El motivo? Expresó su preocupación por la cantidad de estudiantes que no hablan inglés y vinculó su comentario con las recientes políticas migratorias del presidente Donald Trump.
“Deberían venir a Fort Worth, Texas, a la North Side High School. En mis clases hay muchos estudiantes que ni siquiera hablan inglés y están en 10º y 11º año de secundaria”, fue lo que escribió el docente como respuestas a una publicación del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE).
“Tienen que utilizar el traductor de su celular para hablar conmigo. El Departamento de Educación de EE.UU. también debería hacer una revisión completa del sistema escolar en Texas”, agregó el profesor. El mensaje, proveniente de la cuenta @HookEm232, pronto se hizo viral y generó reacciones divididas de muchas personas.
ESCUELA EN TEXAS COMENZÓ UNA INVESTIGACIÓN
La reacción de la North Side High School no se hizo esperar y compartió un comunicado donde informó que inició una investigación sobre el caso. Además, indicó que el docente en cuestión era un maestro sustituto y que había sido retirado temporalmente del campus mientras se esclarecía la situación. El Distrito Escolar de Texas también aseguró que tomará las medidas correspondientes según el resultado de la investigación.
Más allá del mensaje original, la cuenta @HookEm232 también había realizado publicaciones críticas hacia otros docentes, especialmente aquellos que promueven iniciativas de diversidad, equidad e inclusión. En un mensaje adicional, expresó su frustración por tener que compartir espacios con profesores de ideologías diferentes a la suya, evidenciando un trasfondo político en su postura.
La superintendente interina de Fort Worth ISD, Karen Molinar, salió al paso de la controversia asegurando que la institución mantiene un compromiso firme con la inclusión y el respeto hacia todos los estudiantes, independientemente de su origen. Molinar enfatizó que las escuelas deben ser espacios seguros y de aprendizaje para todos, y reafirmó el apoyo a las familias inmigrantes ante la incertidumbre generada por las políticas migratorias federales.
Este hecho abrió nuevamente el debate sobre el papel de los docentes en temas migratorios y políticos. Mientras algunos argumentan que los maestros tienen derecho a expresar sus preocupaciones, otros consideran que comentarios de este tipo pueden generar un ambiente complicado en las aulas y afectar la confianza de los alumnos.
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