La emoción por recibir una caja llena de hamburguesas, papas fritas y nuggets provocó que un niño se ponga a bailar con la comida en mano. Sin embargo, la felicidad le duró muy poco al abrirse el paquete y terminar todo en el suelo. “Oh, no. Erick”, recriminaron sus amigos. (Fuente: @allfails)