Paolo Guerrero llegó a la sede de la FIFA, en Zurich, para conversar con el presidente del ente máximo del fútbol mundial, Gianni Infantino. La reunión, en la que también participó el titular de la FPF Edwin Oviedo, duró aproximadamente hora y media.
Tal como lo dijo Paolo Guerrero antes de partir rumbo a Suiza, viajó con la esperanza de traer buenas noticias. Sin embargo, el encuentro con Infantino no tendría los resultados esperados a favor del delantero de la selección peruana.
“Gianni Infantino expresó su profunda comprensión de la decepción de Guerrero por no poder unirse al plantel peruano para el Mundial 2018”, dijo la FIFA.
“Sin embargo, el presidente de la FIFA también hizo hincapié en el hecho de que la sanción fue impuesta por el Tribunal de Arbitraje del Deporte, después de un recurso interpuesto contra una decisión de un organismo judicial independiente de la FIFA”, agregó.El Comercio/AFP