El 2013 fue el peor año para la libertad de expresión en Ecuador. Al menos eso es lo que asegura el informe anual de la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios. En él se señala que el país gobernado por Rafael Correa violentó en 174 ocasiones a los medios, periodistas y ciudadanos que ejercieron su derecho a expresarse.
Según el documento, los medios de comunicación privados y públicos fueron las principales víctimas de estas agresiones. Siendo los medios no estatales los que recibieron casi la totalidad de ataques, 63 de 64. “Es evidente que las agresiones están dirigidas principalmente contra medios que no son afines al poder”, señala el informe.
La lista de los principales agresores la encabezan los funcionarios públicos. Con un total de 82 agresiones, al igual que los años anteriores. En segundo lugar (con 53 ataques) se ubica el Estado ecuatoriano con sus medidas administrativas y leyes abusivas.
REVELACIONESEl tipo de agresión más recurrente y alto de las 174 que se registraron el año pasado, según el informe, fueron las declaraciones de las autoridades y figuras públicas. Estas representaron el 16% del total. “En este caso, es habitual que sea el Presidente quien agreda a periodistas y ciudadanos cuando se siente ofendido por la opinión de los mismos”, indica el documento.
El informe también indica que durante el 2013 se incrementó casi 50% los casos de censura. De siete casos de censura previa en el 2012 pasó a 13 episodios en el último año. Este crecimiento inició después de la puesta en vigencia del Código de la Democracia que censuró a los medios en el período electoral.
ESTADO PROPAGANDISTA La investigación revela, además, que el año pasado hubo un aumento excesivo, cerca del 400%, de las cadenas gubernamentales. A diferencia del 2012 que se contabilizó solo 158 enlaces. “Con este incremento casi exponencial del uso de este servicio, gratuito para el Gobierno, se deja en evidencia que el Ecuador se convirtió en el Estado de la propaganda gubernamental”, señalan.
El documento concluye con un recuento de los principales atentados contra la libertad de expresión en el país, como el asesinato del periodista Fausto Valdiviezo, el 11 de abril de 2013. En este hecho, el móvil del crimen, así como la relación entre la víctima y los implicados del asesinato aún no han sido esclarecidos.