Washington [DPA]
La epidemia de ébola es el mayor reto sanitario global desde la emergencia del sida, afirmó el director de la autoridad de salud estadounidense CDC, Thomas Frieden.
“En los 30 años que he trabajado en la salud pública, lo único parecido a esto ha sido el sida”, afirmó el director del Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos durante una conferencia organizada por el Banco Mundial en Washington.
“Ahora tenemos que trabajar para que no se convierta en el próximo sida”, advirtió, en referencia a las reiteradas llamadas a la comunidad internacional para que aumente sus esfuerzos para lograr contener el virus en África occidental.
Hasta ahora los países donantes solo aportaron una tercera parte de los 988 millones de dólares que Naciones Unidas ha solicitado para luchar contra la enfermedad y lograr que los países más afectados se estabilicen.
En Madrid, la subdirectora del Hospital Carlos III, donde la enferma de ébola se encuentra aislada desde el lunes, dijo que su estado de salud empeoró en las últimas horas. “No hay grandes (esperanzas)”, dijo consternado su hermano ante los medios de comunicación a las puertas del centro hospitalario.
En Alemania, el enfermo de ébola procedente de Liberia que fue ingresado hoy en el hospital Sankt Georg de la ciudad de Leipzig se encuentra en estado “extremadamente crítico”, aunque estable, informó el director del equipo médico, Thomas Grünewald.
En tanto, durante la conferencia en Washington, los presidentes de Guinea, Liberia y Sierra Leona pidieron el envío de más trabajadores sanitarios y más dinero, no solo para frenar la epidemia, sino para evitar la debacle económica de las naciones afectadas.
“Los países están en una situación muy frágil”, afirmó el presidente de Guinea, Alpha Conde, quien señaló que dos tercios de los afectados forman parte de un segmento de edad económicamente más activo, el comprendido entre los 15 y los 50 años. Por su parte, Liberia se ha visto obligada a desviar sus fondos de desarrollo hacia la lucha contra el ébola, explicó por videoconferencia la presidenta del país, Ellen Johnson Sirleaf.
Según el Banco Mundial, la epidemía podría provocar daños económicos por unos 32.400 millones de dólares en África Occidental de aquí a finales del 2015.
Fracaso internacional
En una entrevista con el diario británico “The Guardian”, el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, aseguró que la comunidad internacional “fracasó por completo” en su lucha contra el virus. Ahora que el virus ha llegado a España y a Estados Unidos, todo apunta a que la crisis empeorará aún más, indicó.
Kim añadió que hace falta que los gobiernos occidentales apoyen con un nuevo fondo de 20.000 millones de dólares que se quiere crear para hacer frente a emergencias sanitarias.
“Es tarde, es demasiado tarde”, se lamentó. “Deberíamos haber hecho tantas cosas. Deberían haberse creado sistemas de salud. Debería haber habido un seguimiento cuando se reportaron los primeros casos. Debería haber habido una respuesta organizada”.
Según las últimas cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) han muerto ya en Guinea, Liberia y Sierra Leona al menos 3.857 personas por la epidemia. El número de casos confirmados y sospechosos se eleva a 8.011.
El contagio en Madrid de la enfermera española ha hecho aumentar el temor a que el virus pueda extenderse en Europa. Tras ello se está estudiando la introducción de nuevos controles en los aeropuertos europeos, informó el portavoz del comisario de Sanidad de la Unión Europea (UE).
“Es una competencia de los Estados miembro, así que cada país puede decidir la introducción de nuevos controles en los aeropuertos. Aun así, lo estamos discutiendo a nivel de la UE y se está considerando”, explicó el portavoz.
De hecho, Reino Unido estableció controles en los aeropuertos de Heathrow y Gatwick en Londres, así como en la terminal para los que llegan en el tren que comunica la capital británica con París, según informó hoy el gobierno. De todos modos aclaró que estos controles son solo para los pasajeros que llegan de los países afectados por el ébola como Liberia y Sierra Leona.