Dos jóvenes de 18 y 19 años, sospechosos de haber participado en el asesinato de un niño boliviano durante un asalto perpetrado en junio pasado en Sao Paulo, murieron hoy dentro de la cárcel en la que cumplían prisión preventiva, informó el portal G1 de la red Globo.
Según el medio, la Secretaría de Administración Carcelaria confirmó que ambos jóvenes fueron encontrados muertos pero no informó las causas de su deceso.
Ambos reclusos habían llegado al Centro de Detención Provisoria de la ciudad de Santo André, en la región industrial de Sao Paulo, hace cuatro días, provenientes de otra cárcel.
Los jóvenes eran sospechosos de haber participado del brutal asesinato del niño boliviano Brayan Yanarico Capcha, de cinco años, muerto de un disparo en la cabeza cuando estaba en brazos de su madre durante un asalto en su casa, en la que vivía con otros familiares bolivianos en un barrio pobre de Sao Paulo. El niño fue asesinado porque no paraba de llorar.
Además de los jóvenes fallecidos hoy, participaron del asalto a la casa de los inmigrantes un adolescente que fue detenido, y otros dos acusados, de 19 y 20 años de edad, que están prófugos.
El caso, que conmocionó a Brasil por sus características de especial brutalidad, reveló la situación de precariedad y las dificultades que enfrentan los ciudadanos bolivianos que emigran a Brasil en busca de oportunidades de trabajo, y acaban, muchas veces, trabajando en situaciones similares a la esclavitud.