Moscú. Los preparativos para la reunión de los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de Estados Unidos, Donald Trump, durante la cumbre del G20 en Argentina, continúan pese a la declaración del líder estadounidense sobre su posible cancelación, informó hoy el Kremlin.
“Los preparativos continúan. La reunión ha sido acordada. No tenemos otra información de nuestros colegas estadounidenses”, dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
El Kremlin salía así al paso de los rumores sobre la cancelación del encuentro entre los dirigentes de Rusia y Estados Unidos después de que lo sugiriera el propio Trump en una entrevista con el diario The Washington Post.
“Quizá no tenga la reunión (con Putin). Quizá ni siquiera tenga la reunión. No me gusta esa agresión. No quiero esa agresión en absoluto”, dijo Trump al comentar el reciente incidente entre las fuerzas navales de Rusia y Ucrania en el estrecho de Kerch, que terminó con el apresamiento de los buques ucranianos.
El presidente estadounidense dijo que estaba esperando un “informe completo” de su equipo de seguridad sobre el suceso, lo que le ayudará “a decidir las cosas”.
“Hemos tomado nota de esa declaración”, aseguró el portavoz del Kremlin al tiempo que indicó que no está claro qué es lo que Trump ha calificado de “agresión”.
“Si califica de agresión las acciones de los barcos militares ucranianos, es una cosa. Se puede discutir si lo ha sido o no. Pero si se refiere a la actuación de los guardacostas rusos para impedir el intento de violación de la frontera rusa, es otra. Y no estamos de acuerdo con eso”, dijo el portavoz del Kremlin.
Trump y Putin tienen prevista una reunión bilateral en Buenos Aires, donde ambos asistirán este viernes y sábado a la cumbre de líderes del G20, en el que sería su primer encuentro desde la reunión bilateral que celebraron en julio en Helsinki.
En su primera reacción sobre la escalada naval en el estrecho de Kerch el presidente estadounidense se limitó a indicar que no le “gusta” lo que ha ocurrido entre Rusia y Ucrania.
Más tajante fue el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien condenó este lunes la “agresiva acción rusa” y pidió a Moscú que entregara a Ucrania los “buques y los miembros de su tripulación detenidos”.
Rusia mantiene que los tripulantes de los barcos ucranianos incurrieron en una violación de las aguas territoriales rusas y deben rendir cuentas por esa conducta ante la Justicia rusa.
Un tribunal de Crimea dejó este el martes en prisión preventiva por dos meses a 12 de los 24 marineros apresados el domingo en el mar Negro y se espera que adopte la misma medida contra los demás tripulantes.
Fuente: EFE