Katmandú (EFE). Con tres teléfonos celulares como toda propiedad, el primer ministro de Nepal, Sushil Koirala, es el mandatario más “pobre” del mundo, posición que ocupaba hasta ahora el presidente uruguayo, José Mújica.
Koirala, de 74 años y soltero, fue nombrado primer ministro en febrero tras una vida dedicada a la política sin haber ocupado nunca ningún puesto en una administración.
A diferencia de algunos de sus colegas de Gobierno, millonarios en unos de los países más pobres del planeta, Koirala no tiene casa propia, ni coche.
De hecho uno de sus tres teléfonos móviles no funciona, de acuerdo con los datos publicados en la página web del Gobierno nepalí, país que obliga a sus políticos a declarar sus activos financieros.
“Ni siquiera tiene una cuenta de banco”, dijo a Efe Prakash Adhikari, portavoz del primer ministro nepalí, que añadió que tras ocupar el puesto se discutió la posibilidad de que se abriese una cuenta para poder recibir su salario como mandatario.
“Su salario se lo entrega su secretaria en metálico”, afirmó Adhikari.
VIVÍA CON SU SOBRINOConocido en su país por su estilo de vida sencillo, Koirala vivía con un sobrino en un piso alquilado en Katmandú hasta que en 2010 fue nombrado presidente del Partido del Congreso de Nepal, la formación política más antigua de la nación del Himalaya.
“Cuando se convirtió en presidente de su partido se mudó a una casa más grande para celebrar reuniones allí”, explicó a Efe Shekhar Koirala, sobrino del mandatario.
De acuerdo con Shekhar, la nueva vivienda la pagó su formación política, mientras que el Gobierno se ha hecho cargo de los gastos médicos derivados de varios viajes a Estados Unidos para tratarse un cáncer.
Koirala incluso devolvió 650 dólares que recibió como dietas para asistir a una conferencia internacional en Birmania.
El mandatario, que ahora se aloja en la residencia oficial que conlleva su puesto, se desplaza en la capital en un coche prestado por sus seguidores, mientras que cuando viaja fuera de Katmandú miembros locales de su partido le proporcionan vehículos.
Uno de los seis hijos de un contratista forestal, Koirala heredó tierras agrarias en las fértiles regiones del suroeste y sudeste del país, en la frontera con la India. “Pero se las dio a sus hermanos. Nunca le han interesado las posesiones materiales”, dijo Shekhar.
COMPARACIONES CON MUJICAHasta ahora el presidente de Uruguay, José Mújica, era considerado por la prensa como el mandatario más “pobre” por su estilo de vida austero.
Mújica de 78 años, vive en una humilde granja, sin apenas seguridad y dona casi todo su salario al Plan Juntos que creó para la construcción de viviendas destinadas a familias pobres.
La única posesión declarada por Mújica es un Volkswagen “escarabajo” con 20 años de antigüedad valorado en 1.900 dólares, aunque el año pasado adquirió una tableta Ipad para leer la prensa.
Además de vidas austeras lejos de los lujos, Koirala y Mújica comparten un tumultuoso pasado con estancias en prisiones por sus actividades políticas.
Si el uruguayo estuvo preso en duras condiciones antes y durante la dictadura (1973-1985) por integrar el movimiento guerrillero Tupamaro, Koirala pasó tres años en cárceles indias y nepalíes por su implicación en el secuestro de un avión a mediados de los 70.
El nepalí pasó 18 años de exilio en vecina India debido a su activismo político cuando su país era gobernado por un rey autoritario y estaban prohibidos los partidos políticos.