Una transexual denunció que fue expulsada sin razón de la liga mexicana de fútbol femenino, torneo en el que participaba desde el año pasado. El oficial consejo contra la discriminación de la Ciudad de México calificó el suceso de discriminatorio.
Miranda Itzayana, que en junio de 2012 firmó por los Jaguares Aldana acreditando su condición de mujer con un documento del registro civil, explicó a la agencia AFP que aunque inicialmente no hubo inconvenientes para su participación en la liga, los equipos rivales presionaron para que la echaran asegurando que se estaba dejando jugar un hombre.
Cuando salía al campo, jugaba con la presión de los gritos y las consignas homofóbicas y transfóbicas, un ambiente agresivo en mi contra con jugadoras que siempre eran más fuertes conmigo y, cuando me cometían falta, era un festejo, contó la futbolista de 44 años a la agencia AFP.
Itzayana jugó en la primera división masculina, en equipos como Pumas, entre 1985 y 1992. En febrero pasado, cediendo a las presiones y sin ningún fundamento, la junta general de la liga decidió no dejarla jugar más y advirtió a los Jaguares que si no la despedían, el club sería suspendido.
Y aunque su equipo amenazó con expulsarla si denunciaba el caso ante las autoridades pertinentes, Miranda decidió llevar su historia al Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (COPRED), ligado a la Secretaría de Desarrollo Social de la alcaldía capitalina, que hoy finalmente se pronunció sobre el caso.
El COPRED considera discriminatorio que se prohíba jugar a una mujer transexual en la Liga Mexicana de Futbol Femenino y solicita que se repare el daño causado a la futbolista inscribiéndola en el siguiente torneo y cambiando su reglamento, dijo el organismo en un comunicado.